El programa Naalé Zohar ofrece a todo joven judío la posibilidad de cursar los últimos tres años de educación secundaria en Israel de forma totalmente gratuita. A los participantes no se les requiere obtener la ciudadanía con las responsabilidades que eso conlleva, sino que mantienen su status de turistas a lo largo de su estadía en el país, con la posibilidad de elegir hacerse ciudadano al finalizar la cursada.
El programa tiene 18 años y nació para el público judío de la ex Unión Soviética. Hace diez años, se expandió a nuestro continente y, para sorpresa de muchos, cuenta con 400 egresados, lo que constituye un éxito palpable. De esos, la gran mayoría hicieron alia, siendo hoy ciudadanos israelíes.
En los años de crisis económica, llegaron a tener 150 estudiantes participando en sólo un año. Hoy, luego de una merma en la alia desde que Argentina recuperó su estabilidad económica, se estima una participación de 30 alumnos provenientes en su mayoría del insterior del país, quienes comenzarán los cursos en septiembre del año que viene.
Lalo Slepy, director del programa Naale Zohar para América Latina, explicó a Nueva Sión, durante su reciente visita a Argentina, el proceso de inscripción al programa, que cuenta con exámenes que analizan las aptitudes psicológicas, sociales y de aprendizaje para constatar que quienes sean admitidos posean las aptitudes necesarias para cursar un programa de estas características.
La intención del programa es clara: que toda la familia pueda transportar su vida a Israel, acompañando luego al joven que decida su alia. Sin embargo, no es éste un requisito para ser parte, siendo posible también ingresar buscando un título de reconocimiento internacional como el israelí.
“Si analizamos la historia, la mayoría de la alia fue siempre por necesidad. Pero siempre hubo también una minoría ideológica proveniente de los movimientos juveniles, que en cierta forma iluminaron ese camino y construyeron el Estado”, dice Slepoy. “Con toda la gente golpeada que llegó a Israel, parecía que el país no debería haber logrado florecer, y sin embargo hoy Israel es parte del primer mundo y cuenta con tecnología, siendo incluso el primer país en el mundo que oficialmente declaró haber salido de la crisis”.
Sobre su rol como enviado de la Agencia Judía para Alia, durante el período 2002-2004, durante el cual 10.000 personas, principalmente de Argentina y Uruguay, emigraron a Israel, Slepoy reflexiona sobre el resultado: “De los que salieron, 15% regresaron. Eso es mucho, pero es también histórico que haya tenido éxito la integración de 8.500 personas que entraron al país buscando mejores condiciones de vida”.
Naale Zohar se encuentra entonces en el marco de los programas e incentivos que mantienen el Estado de Israel y la Agencia Judía para hacer de la alia una posibilidad para todas las personas amparadas por la Ley de Retorno.
