La amenaza de Al Qaeda, en un video de Ayman al-Zawahri, segundo de Osama bin Laden, fue la primera señal de que la red terrorista pensaba explotar la ofensiva israelí en El Líbano, contra Hezbollah, y en Gaza, contra Hamas, para convocar a las milicias islámicas y ampliar el combate.
«No podemos mirar cómo los obuses queman a nuestros hermanos en Gaza y en El Líbano y quedarnos de brazos cruzados, humillados», dijo al-Zawahri, quien agregó que «el mundo entero es un campo de batalla abierto».
«La guerra con Israel no depende de ceses de fuego. Es una yihad (guerra santa) por amor a Dios y durará hasta que (nuestra) religión triunfe… de España a Irak. Atacaremos en todas partes», dijo.
