Yossi Beilin y Yasser Rabbo, los arquitectos del ‘Acuerdo de Ginebra’, estuvieron en Argentina:

“Israelíes y palestinos tenemos una historia de oportunidades perdidas”

Traídos por la Fundación Tres Culturas, de España, los arquitectos del ‘Acuerdo de Ginebra’, el palestino Yasser Rabbo y el israelí Yossi Beilin pasaron por la Argentina para promocionar dicha propuesta integral de paz entre israelíes y palestinos. “La Iniciativa o Acuerdo de Ginebra es el plan más serio y detallado que existe -dicen coincidentes-. Y Sharón así lo ratifica cuando afirma que se ve obligado a armar el Plan de Desconexión Unilateral porque, sino, se vería obligado a aplicar el Acuerdo de Ginebra”. Beilin y Rabbo dieron varias conferencias conjuntas. Nueva Sión los siguió en su estadía en el país por lo que se reproduce, más abajo, algunas de sus ideas y propuestas más destacadas vertidas en esos encuentros plagados de realismo y esperanza.

Por Guillermo Lipis

Yasser Rabbo: “El retiro de Gaza debe conducir al Acuerdo de Ginebra”

Hay una cuestión que siempre enfrentamos, y es la pregunta de si la Iniciativa o Acuerdo de Ginebra era necesario.
Pensamos es esta propuesta luego del fracaso de las negociaciones de 2001.
Beilin y yo sentimos que entonces estábamos muy cerca del acuerdo y compromiso histórico.
El tiempo no jugaba a nuestro favor. Las condiciones se estaban deteriorando cuando Sharón visitó los lugares santos de Jerusalem (la Explanada de las Mezquitas o Monte del Templo), había un aumento de desconfianza y el escepticismo.
La confrontación estaba alcanzando límites sin precedentes y todos los acuerdos de paz estaban colapsando. La desconfianza y falta de fe crecía al mismo tiempo que cada sector pensaba que el otro no quería la paz.
Ahí sentimos que teníamos una función que cumplir cuando vimos que se instalaba la idea de que el otro no quería la paz y que no había un socio para lograrla.
Queríamos hacer algo para demostrar que, a pesar de este deterioro, aún había esperanza.
Todos pensaban que era una especie de locura, hablar de la paz en este contexto parecía una locura porque avanzábamos a contramano de los que vaticinaban la guerra.
Decidimos, entonces, continuar con lo que se había detenido porque había que demostrar que aquel legado estaba vigente. Así que tomamos las propuestas de Clinton, de fines del 2000, que incluía temas tan espinosos como el status final de los refugiados, Jerusalem y las fronteras.

Con el Acuerdo de Ginebra queríamos demostrar que la paz era posible más allá de sus logros y fracasos.
Queríamos mostrar un modelo detallado y práctico que reflejara que las aspiraciones de palestinos e israelíes no son, necesariamente, contradictorias y que podemos convivir y satisfacer necesidades básicas sin poner en peligro al otro pueblo.
Así que iniciamos negociaciones serias en las que israelíes y palestinos nos pusimos a trabajar por más de dos años.
Con el Acuerdo de Ginebra formalizamos e introdujimos un modelo de situación de compromiso con formulas muy detalladas sobre:

– El fin de la ocupación iniciada en 1967.
– El derecho a la libertad e independencia de Palestina como un Estado al lado de Israel.
– La obtención de garantías políticas para afianzar el éxito de esta propuesta.
– El consenso sobre un acuerdo en el tema de los refugiados palestinos.

Todo el pasado se vio desafiado por Ginebra, así que es lógico que el plan haya sido criticado. Pero creemos, que nuestro rol como políticos serios era defenderlo.
Hasta Sharón reconoció que se vio obligado a aplicar su Plan de Desconexión Unilateral de Gaza porque sabe que la única alternativa valida es el Acuerdo de Ginebra. El Plan de desconexión de Gaza no iniciara un proceso de paz sino que representa un paso menor para prevenir o impedir que se implemente un plan integral como el de Ginebra.

Sharón entregará Gaza para ocultar lo que hace alejado a los ojos del mundo construyendo asentamientos. No le pediremos a Sharon que no se retire de Gaza, pero israelíes y palestinos estamos trabajando junto a Egipto, Jordania, Rusia, Estados Unidos y las Naciones Unidas para garantizar que esto no sea el final sino el principio de un proceso.
Deben hacerse esfuerzos para que el retiro de Gaza conduzca hacia Ginebra y no reemplace a Ginebra. Este es el desafío durante los próximos meses.
Esta oportunidad es concreta y la Administración Palestina está dispuesta y preparada para iniciar una negociación integral.
Estamos recibiendo apoyo de todo el mundo para reconstruir nuestras instituciones y armar un Estado Palestino que no viva bajo la ocupación. Y Este proceso de construcción de nuestro modelo democrático se verá acelerado si podemos vivir en paz; y el modelo de Ginebra muestra que esto es posible.

Yossi Beilin: “Ginebra es el desafío de un acuerdo permanente”

Uno puede pasar su vida entera haciendo diplomacia pero también hay que preguntarse: – ¿qué hice como diplomático? Me pregunté, entonces, qué hice con el Acuerdo de Oslo (que era un acuerdo para tener un acuerdo).
En ese momento le dije a Rabin: abracemos la oportunidad, podemos tener un acuerdo permanente.
Pero mi sentimiento era equivocado, así que fui a verlo a Arafat para que trabajemos sobre un acuerdo permanente, ese trabajo (que desarrollamos con Abú Mazen) fue la base que luego sirvió para el Plan Clinton y el Acuerdo de Ginebra.

¿Pero qué estaba pasando con todos los planes que intentamos?:

– El Acuerdo de Oslo era un acuerdo para tener acuerdos.
– El Mapa de Rutas es un acuerdo general para tener un acuerdo.
– De Camp David ni siquiera tenemos las actas.
– Taba nunca terminó y tampoco tiene actas.
– El Plan Clinton no tiene documento final, sólo existe una versión oral y un escrito que presenta la esencia del plan sin procedimientos. Lo que hicimos nosotros fue tomar esa esencia del Plan Clinton y armar el Acuerdo de Ginebra.

Sharón decidió retirarse de Gaza. El padre de los asentamientos está desmantelándolos, y todo el mundo está esperando ver cómo se comporta.
Sharón nunca especificó qué va a hacer después de dejar Gaza y afirma que hay que ingresar al Mapa de Rutas. Nosotros decimos que tanto del lado palestino, como del israelí hay gente lista para armar un acuerdo permanente. Este es el verdadero desafío para los palestinos e israelíes que creemos que la paz es posible.

Yasser Rabbo: “Tenemos una historia de oportunidades perdidas”

Ayer -2 de mayo de 2005- hubo un incidente en Tulkarem en el que murió un palestino a manos de soldados israelíes y un soldado israelí. Esto puede parecer un incidente menor, pero en Sharm El Sheik se definió que debía detenerse toda forma de violencia. El incidente de hoy es un intento de socavar la autoridad de Abu Mazen. Al gobierno de Israel no le interesan los acuerdos suscriptos. Nuestra historia es una historia de oportunidades perdidas.
Gaza es sólo el 5% de todo el territorio ocupado, sin embargo es un problema porque es la región más densamente poblada del mundo.

¿Habrá un retiro completo de Gaza de acuerdo al derecho intencional? Queremos que nos garanticen eso, también queremos saber cuál será la forma de contacto con Cisjordania.
Estos temas son minas que podrían explotarnos en la cara; por eso el retiro debería ser negociado y no unilateral: porque de este modo las condiciones del retiro son decididas unilateralmente.
No puedo aceptar a mi opositor como juez y parte y esto es lo que sucede con el retiro unilateral.
El muro está separando parte del territorio palestino y bien podría hacerse sobre la línea del ´67 (posición aceptada por los pacifistas israelíes y palestinos).
Hay fuerzas en la región a las que no les gusta los que hacemos, y otras que se esfuerzan en demostrar que podemos convivir más allá de los extremistas de ambos lados.
¿Por qué pensar que si decimos que la paz es posible, eso es soñar despierto? Yo no entiendo esta lógica, queremos paz, vivir en un mundo diferente y morir como gente común. Es por eso que necesitamos re-educar a las nuevas generaciones. Y todo tendrá un techo muy bajo si no logramos una solución política y una convivencia pacifica entre israelíes y palestinos.

No somos soñadores, somos políticos pragmáticos con una experiencia muy amarga y que estamos haciendo lo posible para aceptar las condiciones fácticas que influyen en la vida de la gente de la región.

Yossi Beilin: “Nunca tendremos paz si seguimos esperando”

Israel tendrá que implementar algún acuerdo. Ya muchos de los Colonos que viven en Gaza están diciendo que prefieren un acuerdo como el de Ginebra porque, al menos, habremos conseguido algo a cambio.
Yo también coincido en que el principal desafío es educar a las nuevas generaciones.
Después de la muerte Arafat se produjo un trauma entre los palestinos. Para los israelíes, ahora, Abú Mazen está reconocido como un socio y un líder pragmático, incluso para Sharón.

Para terminar, lo único que puedo afirmar es que no puedo, ni quiero, esperar más.
En septiembre de 2001 fui invitado a debatir como Edward Said, a la Universidad de Ginebra sobre paz y Justicia. Fueron 2 días de 2 horas cada uno ante 2000 estudiantes.
Said estaba en contra de Oslo, y estoy seguro que estaría en contra de Ginebra. Entonces le dije que yo puedo respetar la filosofía de la Justicia, pero que si seguía esperando jamás obtendría la paz.
Nunca vamos a tener paz si seguimos derramando sangre.
Y les aseguro que no somos tan ambiciosos. Sólo queremos salvar nuestra paz.

Mi lucha en Israel no es la de un loco pacifista, yo participé en cuatro guerras.
Israel logró cosas excelentes en campos tan diversos como la cultura, la ciencia, la economía, la agricultura, etc., y también tuvimos éxito en implantar la idea sionista creando el Estado de Israel para no ser, nunca más, perseguidos. Pero cuando busco en los textos de nuestros fundadores, no encuentro nada acerca de la guerra. La única referencia la hace Herzl en un escrito de 1895: “Debajo de mi balcón escucho a los jinetes que desfilan y veo sus uniformes. Yo creo que en el ejercito judío los oficiales van a tener uniformes color oro”.
Nunca, ni Herzl ni nosotros pensamos que íbamos a tener que combatir por nuestra existencia todos los días.
Esto nos da tres perspectivas:

1- Población:
Si no va a haber paz no hay futuro para un Estado judío dentro de pocos años. Si seguimos teniendo los territorios, se estima que para el 2010 no habrá mayoría judía en Israel.

2- Seguridad:
Israel no es un país muy seguro para vivir. Como gente que vive al lado de un volcán, es lo único que conocen y siguen viviendo allí. Y hay gente que está dispuesta a vivir de esa manera, pero otra no. ¿Cómo lo se?: porque me encontré con mucha gente que regresó a la Argentina por el problema de la seguridad. Por eso es importante la paz. Para lograr el retorno de los judíos a Israel.

3- Repercusión:
Lo que hacemos en Israel repercute en las diásporas. Las alertas de seguridad no terminan en Tel-Aviv. Cuando el Ejército de Israel toma una decisión, tiene que tomar en cuenta -por ejemplo- a Buenos Aires, Londres o Madrid.

Si los fundadores del movimiento sionista vieran todo esto, les preguntarían a los actuales dirigentes:
– ¿Qué les pasa a ustedes que no pueden resolver estos problemas?

Por eso soy obsesivo en la búsqueda de la paz. Y el ‘Acuerdo de Ginebra’ es un esfuerzo común que trata de mostrar que se puede convivir.
Nunca va a haber un acuerdo perfecto, y de cada lado van a seguir criticando las concesiones.
La pregunta es cuál es la alternativa.
El tiempo se agota, y por eso quiero ser optimista.