Néstor Kirchner, Presidente electo de la Argentina

“No llegué hasta aquí para pactar con el pasado”

15/05/03 - Conocida la renuncia de Carlos Menem a competir en el ballottage, Néstor Kirchner -líder del Frente para la Victoria y futuro Presidente de la Argentina a partir del próximo 25 de mayo- afirmó en su comando de campaña -en el Hotel Panamericano- que “no llegué hasta aquí para pactar con el pasado ni con las cúpulas dirigenciales. No voy a ser preso de las corporaciones” afirmó Kirchner poniendo letra clara en lo que serían sus primeros postulados luego de que se confirmara la renuncia del precandidato riojano.

“Luego de la jornada más oprobiosa de la que se tenga memoria en la democracia argentina y con las instituciones jaqueadas, Menem disparó, sin importarle los daños que ocasionara, sobre las instituciones de la República. No debemos sorprendernos de tal actitud -continuó Kirchner-, porque Menem fue quien robó los derechos a los argentinos a la alimentación, a la educación, a la vivienda, a la salud, y ahora vino por el último de los derechos ciudadanos que queda en pie: votar.”
“Las encuestas muestran su verdadero rostro y marcan su último gesto de huida. Una vez más la sociedad argentina, en lo que parece ser un signo trágico de la última década, observa la huída de su dirigencia. Pero también es insoslayable no advertir que el retiro de la fórmula (Menem-Romero) es funcional a sectores y grupos de poder que en la década pasada ganaron en el modelo de la especulación financiera y arruinaron la vida de la ciudadanía. Este es el escenario que pretende construir y continuar Menem con su deserción”.
Refiriéndose a su asunción como presidente de la República, Kirchner intentó dejar algunas cosas claras manifestando dónde piensa ubicarse en la arena política: “el próximo 25 de mayo Argentina tendrá Presidente. Asumiré con coraje y decisión la responsabilidad de gobernar la República presionada por las prácticas especulativas”.
Al cierre de su discurso sentó una clara posición política: “No he llegado hasta aquí para pactar con el pasado ni para que todo termine en un acuerdo de cúpulas dirigenciales. No voy a ser preso de las corporaciones. Estoy decidido a dar vuelta la página de la historia y comenzar a construir un país diferente, con esperanza y optimismo”.
“Pertenezco a una generación que no se dobló ni ante la persecución ni ante el sistema represivo que nos tocó vivir en el país. Tenemos la fuerza de aquellos que nos incorporamos a la política por convicción ideológica y porque no queremos un país con desigualdades. Entre todos, un nuevo tiempo está a punto de comenzar. Estoy convencido -remató con el aplauso cerrado de la concurrencia- que vamos camino a un nuevo horizonte”.