Balance preliminar de las economías de América Latina y el Caribe (CEPAL):
– La economía de América Latina y el Caribe creció un 1,5% en 2003 y para 2004 se prevé que se expandirá en un 3,5%.
– Argentina presentó este año una marcada reactivación del 7,3%, después de una retracción de 10,8% en 2002 y será el país que más crecerá en 2003.
– La CEPAL estima que durante 2004 Argentina ocupará el segundo lugar en crecimiento luego de Venezuela.
– Por primera vez desde 1997, no se proyecta un crecimiento negativo en ninguna economía latinoamericana para el próximo año.
– Chile, Costa Rica, Colombia y Perú registraron tasas de crecimiento superiores al 3%, pero el crecimiento en Brasil fue apenas positivo (0,1%) y México se expandió un 1,2%.
– Venezuela se contrajo un 9,5%, tras una baja similar en el 2002. En las demás economías el dinamismo fue escaso y se reflejó en cifras en torno al 2%.
– Por primera vez en medio siglo, la cuenta corriente de América Latina tuvo excedentes en el 2003, de 6.000 millones de dólares.
– La ausencia de ahorro externo y los niveles de ahorro nacional relativamente bajos, limitan la inversión y el crecimiento de largo plazo. La formación bruta de capital permaneció casi estancada y su nivel actual es un 12,5 % más bajo que el alcanzado hace cinco años.
– Un dato relevante para la CEPAL es el fortalecimiento interno alcanzado por los países tras años de turbulencias, de los cuales la mayoría está emergiendo con políticas fiscales y monetarias bajo control así como con tipos de cambio más competitivos. Economías que enfrentaron crisis profundas, como las de Argentina y Brasil, ya iniciaron su recuperación.
– Las estimaciones del crecimiento durante el cuarto trimestre del 2003 indican una aceleración de la actividad económica en relación con el mismo período del 2002 y permiten proyectar una tasa promedio de 3,5% para el año próximo.
– La CEPAL estima que el próximo año Argentina crecerá un 4,5%, Brasil tendrá una mayor expansión calculada en el 3,3%, sustentada en la recuperación de la demanda interna, en tasas de interés internas en continuo descenso y en la recuperación de la actividad industrial