La noticia llegó a Israel en horas de la noche del domingo, una hora antes del inicio de una presentación de los veteranos Pedro y Pablo, a quienes cientos de argentinos fueron a ver en una sala de Tel Aviv, lo que permitió escuchar un zumbido de agitadas conversaciones que expresaban una generalizada insatisfacción, solo paleada por el comienzo del espectáculo, la «marcha de la bronca» y la esperanza de que la noticia hubiese sido incompleta o mal interpretada.
Pero en la mañana del lunes quedó en claro que se trata de una decisión oficial y que las explicaciones por parte del canciller Héctor Timerman se darán sólo a los familiares de las víctimas, a quienes prometió mantenerlos al tanto de las decisiones que devengan del diálogo con Irán.
«La comunidad argentina en Israel está sorprendida e incómoda ante la violación de la independencia del poder judicial argentino». Así definió León Amiras -presidente de la Organización Latinoamericana en Israel (OLEI), el ente representativo de los 150 mil inmigrantes latinos y más de 80 mil argentinos en Israel- el acuerdo al que arribaran los gobiernos de Argentina e Irán.
A días de darse a conocer la existencia de un acuerdo Argentina-Irán Amiras, abogado cordobés e israelí, se preguntó retóricamente: «¿Cómo pueden asegurarse las prerrogativas del juez investigador -su inamovilidad, su inmunidad y su capacidad para trabajar sin ser molestado y amenazado- en las condiciones de un país como Irán, una tiranía que niega el Holocausto y llama a destruir el Estado de Israel, amén de reprimir violentamente toda oposición en su seno?». Y se respondió a sí mismo: «Esto no es más que una cachetada virtual a la democracia y la sociedad argentina, y a veinte años de los atentados a la Embajada y a la AMIA, la sensación es que marchamos hacia atrás y no para adelante».
Uno de los párrafos que enojaron ayer muchos israelíes involucrados en las relaciones con Argentina fue aquel en el que la Cancillería argentina rechazaba la reacción israelí aludiendo que en el atentado a la AMIA no murió ningún israelí: «Es sarcástico que sea Timerman quien afirma que Israel no tiene lugar a involucrarse» señaló una fuente que conoce muy de cerca la historia de las relaciones argentino-israelíes – «Timerman Hector, hijo de Jacobo Timerman, a quien Israel salvó la vida arrancándolo de las garras de la dictadura militar, a pesar de no ser israelí».
Otro veterano conocedor activo de las relaciones israelo-argentinas nos explica con extensión el derecho que tiene Israel a elevar signos de pregunta en lo referido a los ataques contra la AMIA y la embajada israelí, agregando que «pareciera que Cristina Kirchner ve en este acuerdo una muestra de independencia argentina frente a los EE.UU.», pero «Le pediríamos a Cristina que sus juegos de independencia no los juegue sobre la espalda de las víctimas de los atentados ni sobre las del Estado de Israel”.
Altas fuentes en la Cancillería israelí confirmaron que lo que aumentó la indignación de las autoridades locales fue el haber dado semanas atrás –extraoficialmente- el visto bueno para que el interrogatorio de los «requeridos» iraníes por la justicia argentina fuesen interrogados por representantes de la justicia argentina en un tercer país.
Las fuentes indicaron a este corresponsal «Con esa posibilidad, la de interrogatorio y juicio en un país como Holanda o Irlanda u otro país neutral y de sistema jurídico respetable, podríamos convivir, a pesar de que si Irán está segura de la inocencia de su gente, no debiera temer que lleguen a Buenos Aires para ser interrogados en un país con el que se mantienen relaciones diplomáticas y comerciales».