Por otro lado, tanto el enviado especial de Estados Unidos para Medio Oriente, David Hale como el asesor especial de la Casa Blanca, Dennis Ross, también intentarán convencer a ambas partes de comenzar un dialogo en base a “un Estado palestino con las fronteras de 1967 con intercambios territoriales”, propuesto por Barack Obama.
Ambos delegados han tenido encuentros con israelíes y palestinos, pero no se han dado a conocer detalles de las reuniones. También se supo que viajarán a Jordania y Egipto para continuar trabajando sobre este tema.
Con esto Europa muestra que quiere tener protagonismo en un proceso de paz que en los últimos años lamentablemente no tuvo casi avances y del cual participó exclusivamente Estados Unidos.
Por su parte, los palestinos siguen trabajando para lograr que la ONU los admita como miembro, esto les permitiría más adelante continuar con su ofensiva contra Israel, en tribunales internacionales. Abbas, no renunciará a esta “estrategia” aunque aclaró que es el último recurso si no se retoman las conversaciones de paz, sin embargo se niega a aceptar a Israel como el Estado del pueblo judío, una condición que le pide Netanyahu para volver a dialogar.
Mientras tanto, el canciller Lieberman le ordenó al cuerpo diplomático contrarrestar la iniciativa palestina unilateral en la ONU y lograr los votos en contra del mayor número posible de países.
En el encuentro que mantuvo con Catherine Ashton, amenazó con que Israel renunciará a los acuerdos firmados en el pasado con los palestinos, si éstos continúan con su búsqueda unilateral de un reconocimiento de su estado por parte de las Naciones Unidas en septiembre.