Del total de la población, el 75,3 % es judío (de los cuales más del 70% nació en el país y más del 50% de éstos, es ya segunda generación de israelíes), el 20,5% es árabe y el restante 4,.2% está compuesto por inmigrantes no judíos.
Otro dato poblacional tiene que ver con los “Olim” y los “Iordim”. En el útimo año llegaron al país alrededor de 24.500 inmigrantes y cerca de 12.000 personas optaron por abandonar Israel.
Por otra parte, la OCDE, Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico publicó un estudio que indica que la brecha económica en Israel es una de las peores de todos los países desarrollados, es decir que los ricos son cada vez más ricos y los pobres cada vez más pobres, y que es un país líder en lo que a desigualdad de ingresos se refiere.
Los economistas de la OCDE informaron en el estudio que en Israel los ingresos de una familia que pertenece al 10 % más rico de la población, es 14 veces mayor que los ingresos de una familia del 10% más pobre, mientras que en otros países, el promedio es sólo 9 veces mayor.
