Los procesados pertenecerían a grupos de ideología nacionalista y skinheads, productores de propaganda nacional socialista encargada de realizar demostraciones, marchas, conferencias y conciertos.
Además uno de ellos se dedicaba a la compra y venta de libros en un local donde solían concurrir personas con características skinheads.
Durante el procedimiento de detención, se incautaron dos banderas negras con una cruz celta blanca, otra con la inscripción “Blood Honour Argentina” con una esvástica de sólo tres patas, varias remeras negras con inscripciones nacionalsocialistas, CD y DVD con canciones y películas alusivas y calcomanías con la leyenda “Blood Honour Argentina”.