El acuerdo que el Mercosur firmará con la Autoridad Palestina se encuadraría dentro del Sistema Global de Preferencias Comerciales entre Países en Desarrollo (SGPC), por el cual las naciones signatarias se han comprometido a ofrecer márgenes de preferencias del 20 por ciento sobre las tarifas aplicadas a un universo que comprenderá el 70 por ciento de sus productos.
En la misma línea, las autoridades de los respectivos países informaron acerca de la apertura de próximas negociaciones con Siria e Irán, con el objeto de avanzar en la misma dirección.
Según afirman fuentes oficiales dicha iniciativa se inscribe en el marco del fortalecimiento de la estrategia de profundización del eje Sur-Sur. Dicho acuerdo comprende a los cuatro miembros del Mercosur más Corea del Sur, India, Cuba, Egipto, Malasia, Marruecos e Indonesia.
En este contexto, merece subrayarse el hecho de que los diplomáticos del bloque latinoamericano enfatizan la diferencia que marca esta iniciativa en relación a las trabas que existen para llevar a buen término la ronda de Doha, que abarca simultáneamente la mayor apertura en bienes agrícolas, industriales y de servicios, entre las principales potencias y el resto del universo de países desarrollados.
Según destaca Clarín en su cobertura del referido acontecimiento, el próximo canciller brasilero Antonio Patriota, actualmente número dos de Itamaraty, habría manifestado que “la crisis internacional que se vivió entre 2008 y 2009 revela qué acertada fue esa política de apertura comercial entre países del mismo nivel de desarrollo”.
En ese contexto se supo además, por intermedio de los embajadores Alberto Dumond y Roberto Azevedo, ambos representantes de Argentina y Brasil en Ginebra, que en breve se sumarán Argelia e Irán al grupo que conforma el Acuerdo General de Preferencias Comerciales de San Pablo. Cabe asimismo destacar que el Estado persa estaría por ingresar en la Organización Mundial del Comercio que lo habilita para ser parte de mecanismos de este tipo.
Consultado el canciller Tímerman respecto a si habría restricciones políticas dadas las divergencias diplomáticas con el régimen de Teherán, el ministro respondió que “Irán es parte del Grupo de los 77 al que adhiere Argentina y los 10 países que firmamos este acuerdo de preferencias arancelarias. Por lo tanto no hay ninguna clase de restricciones”.
Por su parte la Agencia Judía de Noticias se hizo eco de la información afirmando el “malestar y sorpresa” que provocó la noticia en el seno de la comunidad judía y el Estado de Israel. En ese sentido, se informa que el ministerio de Relaciones Exteriores israelí procederá a realizar una evaluación de los acontecimientos tras la cual emitirá una declaración al respecto, citando un anuncio emitido por la directora general de la cancillería israelí para América Latina y el Caribe, Dorit Shavit.
Entretanto, el embajador de Israel en la Argentina, Daniel Gazit, manifestó que “este es un tema jurídico y tendré que esperar las instrucciones de la Cancillería”, indicó el diplomático a la Agencia Judía de Noticias. No obstante, en un comunicado de la Embajada de Israel el Estado judío se pronunció en torno a la ausencia de un marco legal que posibilite la firma de tal acuerdo, al tiempo que subrayó que una iniciativa semejante implicaría una contradicción con tratados anteriores. En ese sentido, el mencionado comunicado hacía referencia al hecho de que la Autoridad Palestina y el Estado de Israel constituyen una misma unidad económica, lo que conlleva el hecho de que, tan pronto la Argentina ratifique el Acuerdo de Libre Comercio ya firmado entre el Mercosur y el Estado de Israel, los mismos palestinos habrán de verse automáticamente beneficiados de tal medida.
El presidente de la DAIA, Aldo Donzis, expresó que “sí la intención de la Argentina es contribuir a que sigan las conversaciones entre Israel y los palestinos, los últimos anuncios lo único que hacen es entorpecer las negociaciones”. Asimismo, Donzis destacó su malestar por la demora de la firma del acuerdo entre el bloque regional e Israel, al tiempo que destacó el “profundo desconocimiento para llegar a expresarse de esta manera como lo están haciendo. La manera en que se vienen comportando y solo el compromiso que ha asumido demuestra que hay una falta de información respecto del conflicto de Medio Oriente”.
El presidente de la AMIA, Guillermo Borger, lamentó el avance de los vínculos con los palestinos y consideró que la acción “entorpece” las negociaciones de paz en Medio Oriente.
Desde la esfera política no tardaron en llegar los cuestionamientos a la medida. Patricia Bullrich, diputada nacional por la Coalición Cívica, expresó su malestar por el acuerdo de libre comercio entre el Mercosur y la Autoridad Palestina, y que podría ampliarse a Siria e Irán. “Estamos pidiéndole a Irán que envíe a los sospechosos del atentado a la AMIA y también estamos firmando un tratado que surge de la noche a la mañana”, aseguró. Además expresó que “la Argentina está trabajando en el Mercosur desde una perspectiva poco consistente. Pareciera una respuesta al tratado firmado con Israel”.