Según informó el ministro de Seguridad Interior, Yitzhak Aharonovitch, las personas muertas son guardiacárceles que iban en ómnibus a la prisión de Damon, ubicada justamente en la zona incendiada. El vehículo que los trasladaba perdió el control por el humo y quedó rodeado por las llamas.
Luego de una reunión de gabinete de emergencia, y antes de partir a la zona de Haifa, Netanyahu agradeció la ayuda recibida desde Chipre, Croacia, Egipto, España, Francia, Gran Bretaña, Grecia, Jordania, Rumania y Rusia, entre otros. Estos países enviaron aviones y equipos de extinción, una gran cantidad de bomberos, camiones y helicópteros.
El presidente Shimon Peres, quien también visitó la zona agradeció a “todas las naciones que se ofrecieron a enviar aviones. Hubo algunas ofertas que no se esperaban, como fue el caso de Turquía. Es muy agradable que el primer ministro Erdogan, ofrezca su ayuda sin que se lo haya solicitado. Especialmente si se tiene en cuenta la crisis en las relaciones entre Israel y Turquía».
Por otro lado, el ministro del Interior, Eli Yishai, aseguró que iba a exigir una investigación oficial sobre «las fallas en la preparación de Israel para los incendios».
Ya en la zona del incendio, Netanyahu dijo que el estado se encargará de todos los evacuados y de la renovación de la ciudad de Carmel.
Esta mañana, las llamas llegaron a Tirat Carmel y se encontraron nuevos focos de fuego cerca de Isfiya, la prisión de Carmel, y el asentamineto Nir Etzion.
Según los bomberos que están trabajando en la zona, este incendio podría tardar por lo menos una semana en extinguirse.