Luego explicó que Israel solicitó a los organizadores de la flotilla (antes y durante el recorrido) que ingresaran al puerto de Ashdod y que desde allí luego de los controles de seguridad, se entregaría la ayuda humanitaria. Pero esta solicitud fue en vano.
“ Los soldados fueron atacados por activistas al abordar uno de los barcos y al encontrarse bajo amenaza de muerte, se vieron obligados a utilizar herramientas de dispersión de masas y armas de fuego» y agregó el titular de Defensa que algunos de los activistas murieron a causa de fuego vivo.
«La organización que esta detrás de esta flotilla ilegal, es violenta, radical y opera bajo la máscara de una actividad humanitaria, llegó la hora de las responsabilidades, llamo a todo el mundo a actuar con cautela y sentido común, y no dejar que una organización anárquica altere el orden público y saque ventaja de este desafortunado incidente de violencia», concluyó Barak