El sionismo se debate

Conmemorando los 150 años del nacimiento de Herzl

La complejidad de la vida cotidiana nos hace muchas veces perder la perspectiva de los grandes dilemas de nuestra existencia. La dinámica de nuestras actividades y las urgencias de la coyuntura no nos dejan suficiente espacio para el análisis acerca de las cuestiones que atraviesan nuestras decisiones más cruciales.

 

 En ese contexto, la propuesta de Meretz Argentina, conmemorando los 150 años del nacimiento de Herzl, para promover un ámbito de reflexión en torno a los Debates actuales del sionismo, desde 1897 hasta la actualidad, viene a dar cuenta de esta necesidad de volver a instalar la discusión sobre los grandes ejes en torno a los cuales Israel y el mundo judío se ven obligados a repensar sus premisas, cuando se trata de generar respuestas ante los imperantes desafíos a enfrentar.

 En favor de ello el jueves 27 de mayo se realizó un encuentro de reflexión conformado por un panel de expertos, integrado por Darío Teitelbaum (Representante para América Latina de Hashomer Hatzair), Yoel Schvartz (Sheliaj de Masortí Mundial para América Latina) y Enrique Herszkowich (Rector de la Escuela Secundaria Martín Buber y profesor universitario), bajo la coordinación de Rodrigo Remenik.

 Enrique Herszkowich inauguró el panel con un enfoque orientado a analizar la situación del sionismo en relación con la comunidad judía en la actualidad. Desde esa perspectiva, se propuso analizar la evolución de “la cuestión judía” y el vínculo entre el Estado de Israel y la diáspora, destacando el “fortalecimiento y la plena integración de los judíos en los distintos países”, por oposición a una situación anterior de constante amenaza de expulsión. En ese contexto, se destacó el hecho de que “ya no es tan políticamente incorrecto criticar la política del Estado de Israel incluso para los propios judíos”.

 Joel Schvartz subrayó las mutaciones que ha ido experimentando el movimiento sionista a lo largo de la historia. En ese sentido, se enfatizó la revolución que implicó la obra de Herzl como “pasaje de la política filantrópica a la política de masas”, en su decisión de interpelar a las masas de la calle judía para conformar la vanguardia del sionismo. Apelando a los debates imperantes en torno a la definición del sionismo, el sociólogo y antropólogo israelí oriundo de la Prov. de Entre Ríos, refiere al sionismo como un ejemplo de “significante vacío”. Schvartz se sirve de la conceptualización de Ernesto Laclau para dar cuenta de las diferentes perspectivas que disputan la lucha por el significado del sionismo.

 En sintonía con la propuesta de Darío Teitelbaum, se destaca la importancia desde la diáspora de involucrarse en esa discusión. Desde esa perspectiva, el Representante de Hashomer Hatzair para América Latina apela a la cuestión de la responsabilidad que le cabe al pueblo judío en su conjunto. Se trata de interpelar a la diáspora a tomar protagonismo en un debate que orientará los cursos de acción futuros del Estado judío en la definición de su matriz constitutiva y en la toma de posición con respecto a las negociaciones pendientes con sus vecinos. Rescatando recientes iniciativas surgidas en Europa y Estados Unidos, tales como J-Call y J-Street respectivamente, Darío hace un llamamiento a sumar la voz latinoamericana a un debate que ayude a contribuir en la definición de quienes somos, y quienes queremos, debemos y podemos ser. La utopía de la sociedad ejemplar que supo instaurar el movimiento sionista así lo amerita.