Según Al Zawahiri, los norteamericanos no se contentan con Afganistán e Irak y programan ahora invadir Irán y Pakistán; el dirigente de la organización terrorista anunció, sin embargo, que dichos planes serán desbaratados por su agrupación y que la victoria del Islam es inexorable.
Sugestivamente la alusión a Pakistán se produce en momentos en los que -por parte de la India- se dirige el dedo acusador contra Islamabad por su presunta vinculación con los atentados en Bombay.
El gobierno de Pakistán rechazó energicamente esas sospechas pero este "abrazo del oso" de Al Quaeda puede acelerar la ya aguda crisis entre ambas naciones.