El comisionado del servicio israelí de prisiones, Yaakov Ganot, será el nuevo jefe de la Policía nacional, según anunció el ministro de Seguridad Pública, Avi Dichter.
La comisión, presidida por el juez retirado Vardi Zeiler, criticó a Karadi y a otros comandantes por la manera en que manejaron un caso sobre una notoria familia mafiosa en Israel.
“El comisionado Karadi debe ser despedido por no asegurarse de que la Policía investigase exhaustivamente el asesinato, en 1999, de un presunto capo mafioso y por ignorar lazos entre altos oficiales de la policía y el crimen organizado”, dijo Zeiler en una conferencia de prensa. Cabe destacar que Karadi no era el comisionado policial al momento del asesinato, sino el jefe de un departamento.
Los otros dos miembros del jurado afirmaron, en las conclusiones, que el mandato de Karadi no debe ser prorrogado cuando expire este año.
Cancelar su designación «mostraría una norma clara para las siguientes generaciones de que alguien que se comporte como Karadi no podría completar su término como comisionado de la policía», dijo Zeiler a la prensa.
«Si las sospechas del panel son correctas, este es el inicio de una fuerza policial muy corrupta, y la infiltración de figuras del bajo mundo», añadió.
La comisión Zeiler fue creada para examinar si la policía investigó apropiadamente el caso, en el que un policía corrupto confesó haber baleado a un presunto jefe del bajo mundo hospitalizado bajo custodia policial luego de un intento de asesinato.
El policía, que dijo que operaba bajo órdenes de una conocida familia del crimen organizado israelí, fue asesinado más adelante en México, supuestamente por miembros de la familia a causa de su confesión.
Karadi era un alto oficial de la policía en el sur de Israel en el momento del crimen.