La jefa de la oficina del primer ministro, Shula Zaken, y el director de la autoridad fiscal, Jacky Matza, habrían conseguido, para conocidos o parientes, reducciones fiscales y puestos de trabajo y habrían aceptado sobornos, según las informaciones vertidas por la prensa israelí.
La jefa de la oficina de Olmert, se encuentra bajo arresto domiciliario y está previsto que este 3 de enero comience a ser interrogada.
En una gran operación policial, el pasado martes 2 de enero por la noche fue detenida temporalmente e interrogada junto a una veintena de funcionarios de alto rango de la autoridad fiscal, así como empresarios de los cuales, catorce quedaron bajo arresto.
Mike Rosenberg, vocero de la policía, informó que se trata de posibles casos de soborno, fraude, malversación de fondos y chantaje. Y aclaró que el primer ministro, Ehud Olmert, no se encuentra bajo sospecha de corrupción.
