Ni Jorge Kirszenbaum, ahora su antecesor, ni el flamante titular hicieron grandes declaraciones.
Kirszenbaum dejó que las imágenes de un audiovisual hablaran por él acerca de la gestión que le tocó, fortuitamente, presidir -dado el paso al costado obligado de Gilbert Lewi-.
Y Donzis remarcó la necesidad de producir un cambio en la forma y estilo de conducción. Hecho que se contrapuso -o al menos dejó algunas dudas- a sus manifestaciones de la buena tarea desarrollada por la comisión saliente.
El nuevo presidente de la DAIA recalcó la necesidad de armar buenos cuadros técnicos, destacó la necesidad del trabajo en equipo y, si bien se había comprometido a hacer estudiar el involucramiento en la causa AMIA, remarcó lo desarrollado por la gestión que se retiraba y el trabajo de la justicia y los fiscales Nisman y Martínez Burgos.
También se preocupó en manifestar su apoyo al presidente Kirchner que, dijo, lo tendrá de su parte ante toda acción tendiente a resolver el atentado a la AMIA.
El único que se notaba francamente preocupado era su vicepresidente primero, Angel Schindel, quien fuera presidente del Tribunal de Ética Comunitario. “Estamos tomando un tema duro -dijo a Nueva Sión-, pero sentí el llamado y la convocatoria de la gente”, afirmó.
Como novedad, podemos informar que el próximo martes esta nueva comisión se encontrará con representantes de la Asociación de Familiares de Desaparecidos Judíos de la Argentina, tal vez, su primera prueba de fuego, y que marcará el camino (a izquierda o derecha) por donde Donzis y su gente piensan iniciar su flamante gestión.
