El episodio ocurrió cerca de las 15 en el interior de un colectivo de la línea 128 cuando un hombre comenzó a agredir de palabra a un chico de 15 años por pertenecer a la colectividad judía.
Las agresiones verbales pasaron a las físicas cuando el hombre le dio un empujón al joven y le rompió los anteojos.
El adolescente observó el paso de un patrullero de la comisaría novena que transitaba por la calle Guardia Vieja al 3900 e hizo detener la marcha del colectivo para llamar a la policía.
El agresor, acusado de infringir la ley 23.592 de discriminación, fue detenido.