El parlamento, que debe aprobar el emplazamiento naval, votará la semana próxima. Se considera que la aprobación es segura, pues tanto el sector conservador liderado por la canciller Angela Merkel, como sus socios socialdemócratas en la coalición gobernante, tienen una vasta mayoría en la legislatura que respalda el envío de naves de la armada.
«La decisión fue adoptada tomando en cuenta tanto nuestra particular responsabilidad por el derecho de Israel a su existencia, como por una sólida solución para la paz en la región», dijo Merkel a periodistas.
Peter Struck, líder de la facción socialdemócrata en la asamblea, había anunciado horas antes que Alemania enviaría unos 2.400 efectivos militares.
Alemania ofreció enviar buques de guerra a fin de ayudar a implementar el cese del fuego negociado por la ONU que puso fin en agosto a un mes de combates entre tropas israelíes y militantes del grupo islámico Hezbollah.
Sin embargo, se ha negado a seguir a otros países europeos en el envío de tropas de combate a El Líbano. Según señalaron dirigentes en Berlín, el pasado nazi de Alemania descarta la posibilidad de que soldados alemanes queden en una situación donde podrían tener que enfrentar a soldados israelíes.
