Según este informe de AI, Israel cometió «crímenes de guerra» en El Líbano durante su reciente guerra contra Hezbollah.
«La destrucción extensiva de centrales eléctricas, de plantas de tratamiento del agua así como de infraestructuras viales indispensables para el transporte de alimentos y de ayuda humanitaria era deliberada y formaba parte integral de la estrategia militar» de Israel en el sur de El Líbano, afirma la ONG desde su informe acerca de la reciente guerra en el Medio Oriente.
Muchos de esos ataques dirigidos contra estructuras civiles, «ataques indiscriminados y desproporcionados, son crímenes de guerra», insistió la secretaria general ejecutiva adjunta de Amnistía Internacional, Kate Gilmore.
Amnistía Internacional recuerda una declaración del jefe del Estado mayor israelí, Dan Halutz cuando dijo que «nada está a salvo en El Líbano».
No hay información de que el informe aclare acerca la estrategia de Hezbollah de mezclarse con la población civil del sur de El Líbano.