“Memoria e Identidad: Avenidas del Barrio Judío en la Ciudad Literaria”, de Ricardo Feierstein

Una estrategia original

El más reciente libro del escritor Ricardo Feierstein ofrece pistas muy útiles e ingeniosas para poder entender las corrientes de la literatura judeo-americana, con énfasis en la producción de Argentina. Sus “avenidas” sirven como metáforas para grupos de autores que, en la producción literaria, han reflejado su propia visión del mundo en que viven.
Por Stephen A. Sadow *

Esta no es una historia enciclopédica de nombres, títulos, fechas. Por el contrario, cada “Avenida” enfoca cuáles aspectos predominan en la memoria grupal, el estilo producido como resultado y un momento histórico. Un autor puede atravesar dos avenidas o más. No se trata de “ismos” ni de generaciones, sino de corrientes.

Los viajes comienzan desde la Plaza de los emigrantes. Este es el lugar central de los escritores fundadores, del cual brotan la Avenida de la Nostalgia y la Avenida Lingüística”–con autores como Gerchunoff y Samuel Eichelbaun- cuya influencia permea todas las otras arterias.

Por la Avenida de La Memoria Existencial, ligada a la vida judía concreta que experimentan, los escritores incluidos se esfuerzan en representar la realidad tal como la atraviesan: enfatizan las reacciones de la vida cotidiana, sea rural o urbana. Así, obras como las de Lázaro Liacho, Bernardo Verbitzsky y Susana Gertopan describen los avatares de una minoría judía, encerrada en sociedades católicas muy a menudo autoritarias.

La Avenida de la Memoria Mestizada: Integración e Hibridez lleva en sí el concepto de ”crisol de razas”, los debates sobre el multiculturalismo y la posibilidad que los judíos se integren en la sociedad general.

Seis de las novelas del mismo Feierstein exploran este último tema. En “Mestizo”, el protagonista tiene que superar un trauma amnésico para reestablecerse como un judío en un entorno de muchas sub-culturas. La novela se divide en partes que van ordenando los recuerdos a través del uso sucesivo de pronombres cada vez más abarcativos: “yo”, “tú”, “él” y el triunfal “nosotros” del epílogo.

Pero la integración también lleva consigo el peligro de perder la identidad judía: Germán Rozenmacher y Enrique Amster ilustran la angustia de la pareja mixta. Avenida Plural y la técnica del “Collage como forma” irónicamente representan la unidad de la cultura judía latinoamericana de una manera muy variada.

En su extenso trabajo “El Gran Libro de América Latina”, el escritor peruano Isaac Goldemberg reúne la obra de 140 escritores y poetas judíos latinoamericanos (no identificados en cada texto) en 1.300 páginas, para crear una sola voz. Imaginando otro tipo de collage en las  novelas “Mestizo y “La logia del umbral”, Feierstein agrega árboles genealógicos, gráficos explicativos y hasta historietas.

Algunas avenidas restantes son de menor importancia en el esquema, por ser más nuevas y no tan desarrolladas en América-Latina.

En la Avenida Posmoderna: El presente perpetuo, Damián Tabarosky y Martín Kohan trabajan con ese nuevo recorte temporal de los últimos años y descartan la tradición de la memoria, tan presente en el judaísmo desde la Biblia.

Finalmente, en la Avenida del Plagio y la Tecnología (Patricia Suárez y Jorge Bucay) se produce un salto, al considerar estas prácticas como una calle (o recorrido) a la par de las otras, cuando en esta variante –sin duda interesante para comprender una época del acceso a la información y su uso irrestricto-  se han encontrado relativamente pocos casos (por lo menos, los que han sido descubiertos). Pero la investigación del impacto de la tecnología sobre la literatura sí es valiosa.

Como es de esperar, Ricardo Feierstein demuestra un conocimiento enciclopédico de su tema. Hay claridad de expresión y una argumentación que se basa en excelentes pruebas. Los resúmenes de textos literarios citados son fáciles de seguir y un mapa en colores ayuda al lector para conceptualizar la cantidad de ideas ofrecidas en el texto. No obstante, los estudios extensos sobre el desarrollo del surrealismo y el collage podrían haber sido condensados.

Feierstein agrega una serie de apéndices que, de hecho, forman parte de la misma estructura del libro. Estos textos tienden a conformar el modelo de un proceso talmúdico, al comentar o ejemplarizar indirectamente la primera parte de “Memoria e Identidad”. Entre ellos, hay seis cuentos de Feierstein que son ejemplos que transitarían específicas “Avenidas”. Siguiendo a esos relatos, se incluyen breves ensayos cuya temática se enlaza con los argumentos de los textos principales. Al final, Feierstein incluye un resumen de la ponencia sobre las generaciones literarias judeo-argentinas que pronunciara en un Congreso realizado en Kiel, Alemania, en 2001 y que lo motivó a a repensar el tema y escribir este libro.

“Memoria e Identidad” requiere la atención total del lector y tal vez una segunda lectura. Ricardo Feierstein tiene la habilidad de enfrentarse con un tema de enorme extensión y explicarlo a través un sistema nuevo y bien entendible.

* Profesor Titular Emérito del Departamentos de Literatura Latinoamericana y Estudios Judaicos. North Eastern University, EE.UU.