Olmert ordenó al Ejército de su país que continúe con su ofensiva en la franja de Gaza para liberar al soldado, secuestrado en el sur de Israel, en el puesto de seguridad de Keren Shalom, el pasado 25 de junio.
Los secuestradores, los Comités de Resistencia Popular y otros dos grupos palestinos afines a Hamas, exigieron a Israel la liberación de cientos de prisioneros, hecho que ya fue rechazado de plano por Israel.
Las facciones armadas palestinas que mantienen secuestrado al soldado israelí Gilad Shalit han retirado a sus representantes de las negociaciones con los mediadores egipcios después de que venciera el ultimátum dado a Israel para que excarcelase a un millar de presos palestinos como condición para liberar al militar, así puede leerse en la versión digital del diario israelí ‘Haaretz’.
Según el diario árabe editado en Londres ‘Al Hayat’, a pesar del vencimiento del plazo dado por los grupos palestinos, prosiguen los esfuerzos diplomáticos para obtener la liberación de Shalit. Según fuentes palestinas citadas por ‘Haaretz’, se estaría negociando el traspaso de Shalit a manos de Egipto o Francia -el rehén tiene también esta nacionalidad- a cambio de garantías concretas de que los presos palestinos serán liberados a futuro.
Pero, para que esto sea posible, Egipto y Francia deberían conseguir de Israel el compromiso de que liberará a los presos palestinos, detendrá sus actividades en la franja de Gaza y retirará sus fuerzas de la zona, además de acabar con el embargo en Gaza y los asesinatos selectivos.
A cambio, según el citado diario, los milicianos palestinos se comprometerían a cesar sus ataques con cohetes Qassam.