«Yo diría que hay un progreso lento», afirmó Henry A. Crumpton. «Necesitamos hacer más y ayudarlos más.»
Crumpton formuló este comentario en una audiencia ante un panel del Comité de Relaciones Internacionales de la Cámara de Representantes de los Estados Unidos ante la cual compareció para responder preguntas sobre el informe del Departamento de Estado relacionado con las acciones globales contra el terrorismo durante 2005.
En el informe se afirma que simpatizantes de grupos terroristas islámicos como Hezbollah y Hamas «se aprovechan de ese territorio porque no tiene regulaciones firmes y de la proximidad a comunidades musulmanas en Ciudad del Este, Paraguay, y Foz do Iguazú, Brasil, para realizar actividades ilegales y recolección ilegal de fondos».
Como parte del trabajo común, los tres países latinoamericanos y Estados Unidos acordaron formar unidades de inteligencia financiera, compartir experiencias y crear unidades de transparencia comercial que permitan detectar «anomalías» en los flujos de importación y exportación hacia y desde la región.
«No se trata sólo de esfuerzos contra el terrorismo», dijo Crumpton. «También se incluyen temas más complejos como delincuencia internacional y corrupción».
El congresista republicano Jerry Weller, quien le formuló la pregunta sobre la Triple Frontera, dijo que había estado personalmente en esa zona por lo que quería saber cómo evaluaría el Departamento de Estado la cooperación de los tres países.
Crumpton afirmó que: «La cooperación es irregular. Necesitamos alentarlos más, ayudarlos más».
Cuando le preguntaron sobre cuál de los tres países necesitaba hacer un mejor trabajo, Crumpton contestó: «Los tres».