La reina del carnaval de Gualeguaychú en reunión de presidentes en Austria:

“No a las papeleras”

Una activista de Greenpeace vestida con un escueto traje de carnaval irrumpió sorpresivamente en el momento en el que los líderes de Europa y América Latina se sacaban la tradicional foto de familia. De este modo inusual protestó contra la construcción de las papeleras en la frontera de Uruguay con Argentina.

La reina del carnaval de la ciudad argentina de Gualeguaychú, Evangelina Carrozzo, consiguió ser acreditada en la Cumbre de Viena como periodista y, este viernes 12 de mayo, salió de modo imprevisto desde el grupo de periodistas acreditados en el momento en el que los líderes europeos y latinoamericanos posaban en la tradicional «foto de familia» que tiene lugar en cada cumbre.
Carrozzo portaba un cartel de Greenpeace y con la bandera uruguaya y argentina donde podía leerse «Basta Ya de Papeleras Contaminantes».
El incidente provocó la sonrisa de los presidentes, que se vieron sorprendidos por la aparición de una mujer vestida en bikini de lentejuelas y que rápidamente fue retirada del lugar por miembros de la seguridad (¿?).
Gualeguaychú es la ciudad argentina en la costa del río Uruguay situada justo en frente de la localidad uruguaya de Fray Bentos, donde las papeleras españolas ENCE y la finlandesa Botnia están construyendo dos plantas de celulosa con el acuerdo del Gobierno de Tabaré Vazquez.
El proyecto cuenta con la férrea oposición del Gobierno de Argentina, lo que ha provocado un enfrentamiento entre ambos países, que seguirá incluso por la vía judicial con la denuncia que presentó Argentina al Tribunal Penal Internacional de La Haya, que celebrará una vista el 8 y 9 de junio.
Carrozzo explicó a la prensa que consiguió acreditarse como periodista junto con la coordinadora de la Campaña contra la Contaminación de Greenpeace en Argentina, Paula Brugman, quien reclamó «un acuerdo entre los presidentes (Vázquez y Néstor Kirchner) y que lleguemos a lograr un plan de producción limpio para la industria del papel en toda la región».
Brugman aseguró que la empresa española ENCE y la finlandesa Botnia «tienen mucha responsabilidad sobre lo que está ocurriendo entre países que han sido tradicionalmente hermanos».
«Pedimos que las papeleras paren la construcción, que hagan un cambio de tecnología que permita que no se contamine el Río Uruguay».