«Es una seria amenaza contra un aliado de Estados Unidos y Alemania. Lo que Ahmadineyad quiere decir también es que si está dispuesto a destruir un país, también estaría dispuesto a destruir otros. Es una amenaza con la que se tiene que lidiar». Así se refirió George Bush a las declaraciones de Ahmadineyad en las que éste aseguró que Israel debería «ser borrado del mapa» y que el Holocausto es un mito.
Bush afirmó, por otro lado, que creía en una solución diplomática si la comunidad internacional trabaja por ella y continúa unida. Al respecto, agregó que Alemania, Francia, Reino Unido, Estados Unidos, Rusia y China están de acuerdo y están trabajando en un proyecto de resolución del Consejo de Seguridad de la ONU. «Irán, entre tanto, intenta debilitar la unidad en ese grupo. Tiene que tomar la decisión de abandonar sus intenciones», dijo Bush en la entrevista concedida al ‘Bild’.
«Cuando (Osama) Bin Laden dice que atacará el mundo occidental, tomo en serio su amenaza, y cuando el Presidente iraní (Mahmud Ahmadineyad) dice que atacará Israel, también le tomo en serio», concluyó Bush.
El Parlamento iraní amenazó ayer, domingo 7 de mayo, a la comunidad internacional con obligar a su Gobierno a retirarse del Tratado de No Proliferación (TNP) nuclear si continúan las presiones para que Teherán suspenda el enriquecimiento de uranio.
La advertencia forma parte del mensaje enviado al secretario general de la ONU, Kofi Annan, en el que los diputados iraníes también amenazan con llevar al Gobierno a retirarse del Protocolo Adicional del TNP.
En su carta, los diputados dicen que no tendrán otra alternativa que pedir al Gobierno que «revise el párrafo 10 del TNP si el secretario general de la ONU y otros miembros del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas no consiguen asumir sus responsabilidades y solucionar el contencioso pacíficamente».
El artículo 10 del TNP permite a los países firmantes del tratado que se retiren del mismo si ven perjudicadas sus intereses supremos.
Poco antes de hacerse pública la carta, el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, Hamid Reza Asefi, había advertido de que una posible resolución del Consejo de Seguridad de la ONU contra Irán dará lugar a un «enfrentamiento» entre Teherán y la comunidad internacional.
«El envío del caso nuclear al Consejo de Seguridad y la (posible) adopción de una resolución incorrecta al respecto hará que la cooperación se convierta en enfrentamiento», dijo Asefi a los periodistas en Teherán.