¿Nuevo giro en la Causa AMIA?

La DAIA denunció a Ruckauf y Kirchner abre más archivos

Como adelantará el titular de la DAIA, José Hercman, en su discurso pronunciado durante el Acto Central por el 9º aniversario del atentado a la AMIA, la entidad denunció penalmente, por omisión de sus obligaciones de funcionario público, a Carlos Ruckauf. La presentación se fundamenta en que siendo Ruckauf Canciller de la Nación, envió a las autoridades de Irán, a través del Encargado de Negocios de ese país en la República Argentina, una carta pidiendo disculpas por la resolución judicial del juez Juan José Galeano quien solicitó la detención de funcionarios iraníes involucrados en el atentado, en lugar de remitir los exhortos para que se cumplimenten las ordenes del magistrado. La denuncia fue presentada por la abogada Marta Nercellas en el juzgado federal Nº 9, a cargo del Dr. Juan José Galeano.

La DAIA señaló que cuando salieron las órdenes de captura emitidas por el juez Juan José Galeano contra los iraníes acusados de participación en el atentado, Ruckauf le dirigió una nota al gobierno de Teherán pidiéndole disculpas “por el exabrupto del juez”. Al parecer, la nota cursada por Ruckauf fue borrada del mapa y no existe copia en la Cancillería, como tampoco hay copia de una respuesta de Irán.
Por este motivo junto con el cargo por incumplimiento contra Ruckauf, la DAIA solicitó “que se allane el domicilio y las oficinas del ex ministro, en la búsqueda de esos documentos”.
Más tarde que temprano, la DAIA consideró que el ex funcionario trabajó para “obstaculizar e impedir” el esclarecimiento del ataque.
“En el texto que Ruckauf envió a Teherán incluso aconsejó al gobierno iraní que nombre a un consultor (en Buenos Aires) para que examine la causa (del atentado) y provea la defensa de los terroristas requeridos” agregó Nercellas.
El actual canciller Rafael Bielsa fue quien aportó “los cables enviados por el encargado de negocios de Argentina ante la República Islámica de Irán, Ernesto Carlos Alvarez”, en los cuales se hace mención a este caso.
El gobierno de Kirchner presentó a los iraníes tres veces los pedidos de captura. En dos oportunidades, ese país devolvió las solicitudes sin comentarios y la última vez pidió una nueva traducción de las órdenes de detención de Galeano.
El delito de incumplimiento de funcionario público prevé penas de un mes a dos años de prisión y es excarcelable, pero contempla la inhabilitación especial por doble tiempo para ejercer cargos públicos y el pago de una multa, según el artículo 249 del Código Penal, lo que podría afectar al acusado, que integra la lista de candidatos a diputados bonaerenses del PJ.
Ruckauf estaba al frente del Ministerio del Interior cuando ocurrió el atentado. Después fue gobernador bonaerense y desde principios del 2002 hasta mayo último se desempeñó como ministro de Relaciones Exteriores.
En la imputación, la abogada dela DAIA, Marta Nercellas, afirmó que Ruckauf no hizo nada “ante los cables que anunciaban la profundización del conflicto en Medio Oriente y el serio peligro que corrimos de que se volviera a agredir a nuestro país con una acción terrorista”.
La acusación a Irán fue siempre impulsada por el gobierno de Estados Unidos, por Israel y por la SIDE, aunque existen otras posiciones sobre el tema que señalan que el régimen de Teherán, nunca fue acusado de poner bombas para matar de manera indiscriminada.

Nuevos decretos para abrir más archivos

En otro orden de cosas, el Presidente Kirchner firmó un nuevo decreto para abrir los archivos de las fuerzas de seguridad. Así lo informó Gustavo Béliz, Ministro de Justicia de la Nación.
Kirchner ya había anunciado el decreto mediante el cual levantará el secreto que pesa sobre las actuaciones de todas las fuerzas de seguridad del país para que éstas hagan su aporte a la investigación judicial por la voladura de la AMIA. Luego del acto central en el recuerdo a nueve años del atentado contra la mutual judía el último viernes, el presidente Kirchner ratificó su compromiso de «garantizar la justicia y evitar la impunidad» y sostuvo que esto será «una política de Estado, una lucha de cada minuto, de cada hora, de cada día».