Gaza:

Bombardeo israelí

Al menos dos personas resultaron heridas como consecuencia del impacto de los tres misiles disparados por aviones israelíes contra el recinto presidencial del dirigente palestino, Mahmud Abbas, en la ciudad de Gaza. El ataque aéreo se produjo en respuesta a los disparos de cohetes de fabricación casera por parte de los palestinos contra el sur de Israel.

Los misiles cayeron en Ansar 2, una base prácticamente abandonada de la guardia presidencial y a unos 100 metros de la oficina de Abbas. El Presidente palestino se encontraba en su oficina en Cisjordania en el momento del ataque.
Inmediatamente después del mismo, agentes de Policía palestinos abandonaron dos grandes comisarías en la ciudad de Gaza por temor a otros ataques aéreos.
Nabil Abu Rudeina, portavoz de Abbas, pidió a Estados Unidos y a otras potencias occidentales que intervengan. «Esta escalada llevará a la región a más violencia e inestabilidad, afirmó.
El Ministerio de Interior, que supervisa algunas de las fuerzas de seguridad palestinas, condenó la «agresión» y advirtió que «para cualquier acción, hay una reacción. La ocupación debe comprender que nuestro pueblo tiene la capacidad de ser firme a la hora de hacer frente a estos actos», añadió.
El recinto Ansar 2, antiguamente utilizado por las fuerzas de seguridad palestinas para almacenar material, fue abandonado debido a ataques israelíes anteriores. Los misiles disparados cayeron en una pista de aterrizaje para helicópteros abandonada. Previamente a la agresión israelí, milicianos palestinos habían disparado al menos cuatro proyectiles de fabricación casera.