Durante una breve intervención, el líder de Kadima (Ehud Olmert) explicó que las directrices se establecerán por escrito y que cualquier partido que esté de acuerdo con ellas será bienvenido en la coalición. «La intención es hacer esto lo más rápido posible», subrayó Olmert en palabras declaraciones recogidas por los medios israelíes, precisando que «la situación actual de un gobierno sin autoridad no es saludable y debería terminar lo antes posible».
Por su parte, Peretz precisó que para acelerar el proceso pedirá al Presidente Katzav que encargue a Olmert la formación del nuevo Gobierno.
Según explicó Peretz en su intervención, los dos partidos han estado manteniendo conversaciones secretas en los dos últimos días. «Las cosas progresaron mucho» en este tiempo y, los laboristas y Kadima «llegamos a un punto en el que la confianza era fuerte, y lo hicimos sin que nadie interviniera en el proceso», precisó, subrayando que «estamos ante una nueva era».
Peretz expresó su confianza en que el nuevo Gobierno compuesto por Kadima y el Partido Laborista conseguirá aguantar los cuatro años de mandato y dijo que ambas formaciones habían actuado con «responsabilidad nacional»
En la rueda de prensa ni Olmert ni Peretz -que no aceptaron preguntas- hicieron alusión al reparto de ministerios entre los dos partidos, que supuestamente sería uno de los temas de mayor negociación. Los laboristas quieren el Ministerio de Economía, pero Kadima no parece estar dispuesto a ceder en este aspecto.