Argentina:

Homenaje a religiosos víctimas de la dictadura

Al cumplirse 30 años del golpe militar, y en el contexto de las recordaciones que se efectuarán a lo largo del año, tanto desde el ámbito oficial como de diversas organizaciones no gubernamentales, la Secretaría de Culto de la Nación dispuso la colocación, en la plaza San Martín, de una placa de mármol que recuerde a los religiosos de todos los credos que fueron víctimas del terrorismo de Estado. El acto se efectuará el 21 de marzo a partir de las 11 horas.

Muchos de los sacerdotes, pastores, catequistas y laicos que hicieron propia su opción por los pobres sufrieron padecimientos indecibles: intimidaciones, torturas, asesinatos.
También sufrieron especial ensañamiento los ciudadanos de la comunidad judía y los testigos de Jehová.
Cálculos incompletos elaborados por diversos organismos de Derechos Humanos refieren el asesinato o desaparición de 2 obispos, 18 sacerdotes, 11 seminaristas, 46 católicos laicos, 6 protestantes.
Otros 10 religiosos fueron encarcelados y luego liberados y 34 sobrevivieron a sus secuestros en centros clandestinos de detención.
La represión no sólo alcanzó a religiosos argentinos sino también a extranjeros.
La Secretaría de Culto de la Nación considera un compromiso con la verdad honrar a esas religiosas y religiosos que perdieron la vida, padecieron persecuciones, sufrieron tortura o simplemente se les impidió su labor pastoral. Al mismo tiempo, considera imprescindible que esos hechos sean conocidos por las nuevas generaciones.
La organización del acto está a cargo de la Secretaría de Culto, el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires y la Secretaría de Derechos Humanos.
Hablarán el ministro de Relaciones Exteriores, Jorge Taiana; el secretario de Derechos Humanos, Eduardo Luis Duhalde, y el jefe de Gobierno de la ciudad de Buenos Aires, Jorge Telerman, tras lo cual habrá un oficio en memoria de las víctimas a cargo del sacerdote Domingo Bresci, el rabino Daniel Goldman, el obispo Aldo Echegoyen y un dignatario musulmán.
Asistirán delegaciones de estudiantes de colegios cristianos, musulmanes y judíos, así como de diversas escuelas del Estado y representantes de organizaciones de Derechos Humanos, organizaciones religiosas y familiares de las víctimas.