Holanda estuvo batallando infructuosamente hasta último momento para evitar que la UE expresara en la declaración que lamentaba la publicación de las caricaturas, porque consideraba que no debían disculparse por la utilización de un derecho tan esencial como la libertad de expresión. Pero los ‘naranjas’ no tuvieron más remedio que plegarse a la presión de los demás estados que querían «dejar atrás» este conflicto para apostar por abrir una nueva etapa de «diálogo y comprensión mutua», como enfatizó la ministra austriaca de Asuntos Exteriores y presidenta semestral del Consejo de la UE, Ursula Plassnik. Bajo esta misma línea la UE ratificó su «firme respaldo» a la Alianza de Civilizaciones propuesta por el Gobierno español.
Los Veinticinco destacaron que la libertad de expresión y de prensa son derechos esenciales, pero insistieron en que debe ejercerse en el «respeto de las creencias religiosa y convicciones». En la declaración, no hay ninguna referencia a que la libertad de expresión y otros derechos fundamentales no son respetados en los países donde se produjeron las protestas violentas.
Tras condenar la violencia y expresar su total solidaridad a los estados atacados, la UE reclamó indemnizaciones a los países que no protegieron adecuadamente las sedes diplomáticas europeas en sus territorios durante las protestas.
Entre otros temas tratados, la UE instó a Irán a suspender de inmediato toda actividad vinculada al enriquecimiento de uranio antes del 6 marzo, fecha de la próxima reunión del consejo de la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA).
El Consejo de la UE advirtió que si Irán se empecina en no responder a las peticiones de la comunidad internacional, el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas «debe poner toda su autoridad» para lograr que se respeten las exigencias de la AIEA. Habrá que ver, de todos modos, si después de este pedido de disculpas que hace percibir una cierta debilidad de decisión política de la UE, cómo Irán y otros países árabes consideran las exigencias europeas en lo que aparece como una confrontación cultural entre Oriente y Occidente.