La televisión estatal abrirá un debate sobre la negación del genocidio armenio

Bajo la consigna ‘negar un Genocidio es un crimen’ organizaciones armenias lanzaron una campaña para contrarrestar la intención, de la emisora estatal de televisión de los Estados Unidos PBS, de promover un debate con negadores de dicho genocidio. “Debatir el Genocidio Armenio es equivalente a discutir si existió el Holocausto Judío. ¿Contemplaría alguna vez PBS realizar un programa de este tipo?” afirma la comunidad armenia movilizada en su denuncia pública.

Con esta premisa miles de personas de todos los países del mundo están protestando contra un programa de la Televisión Pública Estadounidense (PBS) acerca del Genocidio Armenio que prevé un debate en donde participarán conocidos negadores del Genocidio.
El programa, de 25 minutos de duración, ha generado una protesta debido a que el panel incluirá a dos académicos que niegan que 1.5 millones de civiles armenios fueron asesinados en Turquía Oriental desde 1915 hasta 1923.
La transmisión del programa está prevista para el próximo 17 de abril, una semana antes del día anual de conmemoración del Genocidio Armenio, y seguirá un documental de una hora, “El Genocidio Armenio”, que describe los eventos que rodearon las muertes, así como la negativa cómplice de sucesivos gobiernos turcos.
Puesto que el documental incluye en sí mismo las negaciones turcas, la discusión serviría para enfatizar la posición oficial negacionista del Estado turco y para socavar la naturaleza no política de la programación de PBS.

Tanto el Consejo Nacional Armenio como la International Armenian Netwok, expresan, de lo siguiente:

1) La negación de un genocidio no es una simple opinión sino la continuación del crimen de genocidio.

2) Es incorrecto relacionar el negacionismo de un Genocidio con a la libertad de expresión.

3) Las libres manifestaciones de opiniones deben ser combatidas cuando, por una parte, amenazan las democracias tendiendo de rehabilitar una ideología genocida y racista, y por otra parte, ofenden la memoria de las víctimas del genocidio y a los sobrevivientes.