Hamas controla 74 de los 132 escaños del Parlamento y, en consecuencia, tiene la capacidad de gobernar sin la necesidad de contar con votos de otros partidos minoritarios.
Sin embargo, el grupo ha expresado que desea formar una coalición, incluso con el derrotado Al Fatah.
Haniyeh es considerado un sujeto pragmático en la jerarquía del violento movimiento islámico.
Israel, por su parte, ya expresó que no llegará a ningún acuerdo con el nuevo gobierno, quitándole millones de dólares retenidos en sus arcas y calificándolo como una «autoridad terrorista».