«Cometí un error al decir que no hubo cámaras de gas en Auschwitz», dijo Irving al tribunal al iniciarse su proceso en Viena. Indicó que el genocidio nazi «era apenas un fragmento de mi zona de interés».
El historiador dijo luego que «de ninguna manera negué el asesinato de millones de personas por parte de los nazis». En declaraciones previas a la prensa, Irving señaló que era «ridículo» que se lo procese en una corte penal por declaraciones formuladas hace 17 años.
Pero Irving, esposado y luciendo un traje azul marino, llegó al tribunal llevando consigo un ejemplar de uno de sus libros más discutidos, «La guerra de Hitler», donde pone en entredicho la magnitud de la matanza de judíos a mano del nazismo.
Antes de comenzar el proceso, Irving, de 67 años, dijo a periodistas que ahora admite que los nazis asesinaron sistemáticamente a los judíos durante la Segunda Guerra Mundial. «La historia es como un árbol siempre cambiante», dijo.
Irving fue detenido en noviembre acusado de dos discursos que dio en Austria en 1989. Según la fiscalía, en esos discursos el historiador negó el exterminio de seis millones de judíos por los nazis entre 1941 y 1945.
Irving podría ser condenado hasta a 10 años de cárcel.