Informe de la Deutsche Welle sobre empresas alemanas identificadas con el nazismo:

Todo queda en familia: Dresdner Bank, Allianz y la IG Farben

El Dresdner Bank (DB) admitió la colaboración en el pasado con el régimen nazi, pese a conocer los horrores del Holocausto. Así se indica en un informe mencionado por el canal de televisión alemán Deutsche Welle (DW). La compañía de seguros Allianz y la química IG Farben están vinculadas al DB por relaciones accionarias. Todas colaboraron con el nazismo y con el exterminio de judíos en el Holocausto.

Wulf Meler, director de Administración actual del DB, reconoció -en un foro sobre una investigación que duró ocho años- que su institución participó en la financiación de los campos de concentración nazis.
El estudio de 2.400 páginas, a un costo de un 1.904.000 dólares, subraya que la segunda entidad bancaria germana era la accionista mayoritaria de la empresa Huta Hoch-und Tiefbau AG, fabricante de los hornos de exterminio que fueron utilizados con los judíos.
Además, ese consorcio, propiedad de Allianz, la mayor compañía de seguros del mundo, se convirtió en el banco de confianza de las SS, las fuerzas especiales de represión del régimen del dictador Adolf Hitler.
La investigación indica que el DB empleó todas las ventajas de negocios ofrecidas por la política racial y de agresión del Tercer Reich y conocía que cada deportado a los campos de concentración era una potencial víctima, dado que suspendía el pago de sus pensiones.
Por otro lado, el entonces director del citado DB, Hermann Josef Abs, también presidía la compañía química IG Farben, fabricante del letal gas Zyklon B, con el cual se exterminaba a los judíos en las cámaras de gas.
El DB también participó con su capital en la construcción del campo de Auschwitz, donde millones de personas fueron asesinadas por los alemanes, afirma el informe, hecho público bajo el título ‘Dresdner Bank y el Tercer Reich’.
La aparición de los resultados de esa investigación, ordenada por el propio banco, avivó la polémica sobre el reconocimiento de culpas de empresas alemanas vinculadas a la maquinaria del nazismo.
Al presentar ese informe, el DB debió hacerlo en otra instalación, después que el Consejo de Judíos de Alemania rechazó una petición para efectuar esa actividad en el Museo Judío de esta capital, al cual ese banco donó al menos 39.000 dólares.
La Deutsche Welle considera que la interpretación de cómo manejar esa inmensa culpa, ligada a los horrores del Holocausto, crea un ambiente de discusión en el país.
La República Federal Alemana trató de alejar el fantasma del fascismo al pagar compensaciones por unos 60.000 millones de dólares a judíos y otras personas víctimas del nazismo.
Además, en 2000, Berlín ofreció otros alrededor de 6.000 millones de dólares a un fondo de antiguos presos de los campos de concentración.