Francia y ‘El clan de los bárbaros’:

Madre de un judío asesinado afirma que fue una agresión «antisemita»

La madre de Ilan Halimi, un comerciante francés de 23 años, secuestrado el pasado 21 de enero por un grupo de extorsionadores, y que fuera torturado y asesinado, denunció que se trató de una agresión antisemita. En declaraciones al diario israelí 'Haaretz', Ruth Halimi afirmó: "Si mi hijo no hubiese sido judío, no habría sido asesinado". La madre de la víctima acusó a las fuerzas del orden de esconder móviles antisemitas en el crimen "porque temen reavivar la confrontación con los musulmanes".

«Le dijimos a los policías que ha habido otras tres tentativas de secuestro de jóvenes judíos, pero ellos insisten en considerar que el móvil es puramente criminal», dijo Ruth Halimi a ‘Haaretz’.
La Policía detuvo, por el momento, a 16 sospechosos (15 en Francia y 1 en Bélgica) de formar parte del grupo criminal, que se hacía llamar ‘el clan de los bárbaros’. Tres de ellos han sido procesados y encarcelados, sin embargo, continúa la búsqueda del líder de la banda clan, Youssef Fofana, de 26 años y una condena previa de 3 años por robo a mano armada.
El cuerpo de Ilan fue descubierto en la periferia de París el pasado 13 de febrero, atado y con una venda en los ojos, con signos de violencia y quemaduras en el 80% de su cuerpo. El joven, si bien fue encontrado con vida, falleció en su traslado hacia el hospital.
La banda había solicitado rescates de entre 450.000 y 100.000 euros, y enviaron fotos del secuestrado, siempre con los ojos vendados.
El mismo grupo podría estar detrás de otros seis intentos de secuestro.
Los familiares no pagaron ninguna cantidad, asesorados por la policía francesa.
«Cinco días antes de encontrar a Ilan, dice la madre del difunto, la policía nos dijo que no respondiésemos a los mensajes. Ilan quizás no habría sido asesinado si lo hubiésemos hecho», aseguró Ruth Halimi, quien estaba juntando dinero para radicarse en Israel.
Una manifestación organizada en París en memoria de Ilan fue escenario, el pasado domingo19 de febrero, de diferentes incidentes, entre ellas dos agresiones. Con el apoyo de algunas asociaciones judías, los gritos de «Justicia» que servían de coro a los cientos de manifestantes se convirtieron, en boca de algunos de los participantes, en «venganza».