Luego del VI Foro Social Mundial:

Buscan concientizar sobre la deuda externa

Tras las deliberaciones del Foro Social Mundial, realizado en Venezuela, muchas organizaciones sociales decidieron diseñar un plan de acción para combatir la presencia de las instituciones financieras en las políticas económicas de la región, que implica también el pago de las respectivas obligaciones que tienen los países con los organismos internacionales de crédito.

Por Favio Orellana

Lo que dejó el reciente VI Foro Social Mundial de Caracas, Venezuela, tuvo su correlato más organizado en la Asamblea de Movimientos Sociales, organismo que sesionó luego de la culminación del encuentro principal y que reunió a muchas de las organizaciones que participaron en el Foro.
De las deliberaciones surgió que el rumbo general de acción en cuanto a la deuda externa de los países latinoamericanos se desarrollaría este año en tres ejes:

1- rechazo al canje de deuda planteado por las empresas multinaciones;
2- realización de auditorias para debatir con pruebas y documentación el carácter ilegal e ilegítimo de la misma; y
3- coordinación de estrategias para supervisar y controlar el rol de los organismos multilaterales de crédito en la política económica de los países endeudados.

“En la Asamblea hay una convergencia de intereses entre los movimientos sociales”, señala Beverly Keene, coordinadora para las Américas de ‘Jubileo Sur’, una red de movimientos y organizaciones sociales, religiosas y políticas que luchan contra el neoliberalismo y sus políticas de endeudamiento.
Es que justamente la dispersión del debate y la ausencia de conclusiones que conlleven un plan de acción integral es lo que suelen criticar algunos de los asistentes al Foro Social Mundial año tras año.
Sin ir más lejos, el Presidente de Venezuela, Hugo Chávez, uno de los principales oradores del Foro que culminó el pasado 29 de enero, advirtió que el evento podría convertirse en un “encuentro folclórico y turístico” si no se avanza lo suficiente para ser un movimiento político con alternativas al modelo neoliberal.
Por ahora, las acciones contra la deuda, por un comercio más justo, por la soberanía y contra la guerra se siguen debatiendo entre la reflexión y la acción concreta.
Un aporte en esta dirección se produjo el 28 de diciembre cuando, en la Argentina, representantes y personalidades de distintas organizaciones sociales, religiosas, políticas y de Derechos Humanos como el Premio Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel, Nora Cortiñas y Mirta Baravalle de las Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, Ariel Basterio, entre otros, presentaron un recurso de amparo para declarar “inconstitucional” la deuda externa y su cancelación por parte del Gobierno nacional.
“La presentación judicial se funda en la violación de la Constitución Nacional y en la ilegalidad de la medida adoptada mediante decreto de necesidad y urgencia, que fue ratificado por el Parlamento, junto a la prórroga de la Ley de Emergencia Económica”, puntualiza la presentación.
Sin embargo, “no hay señales de vida”, se lamenta Keene con respecto al Poder Judicial, y agrega que “eso ya es un indicio muy fuerte”.
En sintonía con lo que se debatió en el Foro y en la Asamblea, en ‘Jubileo Sur’ creen que la iniciativa “permite habilitar otras instancias de reclamo, ya que este es un año en el que hay más confusión que nunca”. Y pone un ejemplo: “La política de desendeudamiento es diseñada por el Fondo Monetario Internacional, no es una política soberana”. Esa fue una de las principales preocupaciones que pesó en Caracas. De modo que decidieron para este año (2006) realizar auditorias que ayuden a esclarecer el complejo tema de la deuda, que, según Keene, “busca profundizar el modelo neoliberal”. Por eso, otro punto de la Asamblea fue el rechazo al canje de la deuda, ya que “es una iniciativa que involucra una deuda que no es tal y que está diseñada por empresas multinacionales que buscan canjear la deuda por la privatización de la educación y los recursos naturales”.
Más allá de la batalla que se viene, en la Asamblea las conclusiones se llevaron a cabo dentro de un mismo contexto: la ratificación del reconocimiento de la población general como acreedora de las postergadas deudas sociales.