Mientras, en todo el mundo islámico crece la indignación por las caricaturas publicadas en periódicos europeos, periodistas extranjeros, diplomáticos y empleados de organizaciones humaniotarias comenzaron a abandonar Gaza ante la manifiesta amenaza de grupos milicianos que parece estar dispuestos secuestrar a ciudadanos europeos si sus gobiernos no pedían disculpas.
En Naplusa, Cisjordania, los milicianos irrumpieron en cuatro hoteles y secuestraron a un alemán, y advirtieron a los empresarios que no alojaran a ciudadanos de varios países europeos.
Christoph Kastel, de unos 30 años y maestro de inglés en Naplusa, fue liberado menos de una hora después, dijo el comandante palestino de Naplusa, Rafah al Rewajba. El comandante palestino indicó que la policía localizó a los cuatro secuestradores y al rehén (en buen estado de salud).
En Gaza, los milicianos dijeron que cerrarían las oficinas de medios de prensa de los cuatro países (Dinamarca, Francia, Alemania y Noruega) en particular la de la agencia internacional, francesa, France Presse. Otros milicianos palestinos lanzaron una bomba de fabricación casera conra el Centro Cultural Francés.
»Los ciudadanos de estos países que estén presentes en Gaza correrán peligro», dijo un miliciano, rodeado por hombres armados, vinculado con el partido Al Fatah de Mahmoud Abbas, frente a la oficina de la Comisión Europea.
Si los gobiernos europeos no ofrecen disculpas, »cualquier visitante de esos países será un blanco», aseguró.
Periodistas extranjeros partían de Gaza y medios de prensa extranjeros cancelaban sus planes de enviar más personal. Noruega cerró la oficina de su representante en Ram, Cisjordania, luego de recibir amenazas relacionadas con la publicación de las caricaturas por un diario noruego.
»Hubo amenazas de dos grupos palestinos, los Comités de Resistencia Popular y las Brigadas de Mártires de Al Aqsa contra diplomáticos daneses, franceses y noruegos», dijo el vocero de la cancillería noruega, Rune Bjaastad.