Sharón viajaba hacia Tel Aviv y se sintió indispuesto cuando hablaba por teléfono con Gilad, uno de sus hijos. Sharón perdió el conocimiento que recuperó luego de ingresar en el Hospital Hadassa. «Su condición es estable y se le están practicando exámenes médicos», afirmó Samuel Shapira, director del hospital, al que fueron llamados de urgencia los mejores especialistas del país.
Boleslav Goldman, su médico personal, afirmó que «no sufre daños permanentes. Está hablando con sus familiares, bromea y mueve todas las partes de su cuerpo», destacaron los médicos.
«Me siento bien. No van a librarse de mí», comentó Sharón a sus familiares desde la cama.
El Presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, llamó por teléfono a la Oficina del Primer Ministro expresando la «rápida recuperación en nombre de los palestinos». Sin embargo, algunos habitantes de la ciudad de Gaza, varios portando banderas de Yihad Islámica, salieron a las calles para celebrar el percance de su eterno enemigo.
Nadie olvida la participación de Sharón en 1982 en la matanza de centenares de civiles palestinos en los campos de refugiados de Sabra y Chatila, en Beirut; ni su visita a la explanada de las Mezquitas de Jerusalem.
El doctor Tamir Ben-Hur dijo que el mandatario, de 77 años, está bien y en condiciones de ejercer sus funciones como jefe de Estado.
Los médicos dijeron que el mandatario sufrió una leve apoplejía cuando un coágulo bloqueó el flujo de sangre a su cerebro.
Por poco tiempo Sharón no pudo hablar claramente, pero se recuperó rápidamente, dijeron.