Mahmud Ahmadineyad:

Afirma que el Holocausto judío es «un mito»

El presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad, sigue imperturbable en su carrera para convertirse en el nuevo lider del ‘eje del mal’ dentro de la política internacional. Ahmadineyad ahora afirmó que el Holocausto es un "mito" y propuso nuevamente que Israel sea trasladado a "Europa, Estados Unidos o Alaska".

Como sucedió la primera vez que Ahmadineyad expuso sus teorías negacionistas del Holocausto -entonces mereció la repulsa del Consejo de Seguridad de la ONU-, la comunidad internacional condenó duramente las definiciones del presidente iraní.
No es la primera vez que desde Irán se vierten estos comentarios sobre Israel y el Holocausto -de hecho, forma parte de la retórica habitual del régimen de los ayatolás-.
Israel expresó su confianza en que «el mundo abra por fin los ojos respecto a Irán», mientras que el presidente de americano George W. Bush, aprovechó la ocasión para subrayar que tenía «buenas razones» para incluir a Irán en el «eje del mal» y reiterar que el régimen iraní representa «una amenaza real».
En Europa, además de condenas, hubo advertencias, como la del ministro de Exteriores alemán, Frank-Walter Steinmeier, quien dijo que estas palabras pueden influir en la política europea respecto a Irán.
«Se ha creado un mito llamado la masacre de los judíos. Si los europeos han cometido este crimen, ¿por qué la oprimida nación palestina debe pagar el precio?», afirmó Ahmadineyad en una manifestación transmitida por televisión a todo el país.
«Tenemos una propuesta para los europeos: si cometieron ese crimen, otórguenle parte de vuestra propia tierra en Europa, en Estados Unidos, en Canadá o en Alaska a los judíos para que establezcan su país», añadió Ahmadineyad, insistiendo en una idea que ya expresó hace unos días en Arabia Saudita y que la prensa iraní ha calificado de «lógica y ponderada».
Las palabras de Ahmadineyad traslucen una estrategia frente a la negociación con la comunidad internacional respecto el programa nuclear que, según las autoridades iraníes, sólo tiene intenciones pacíficas, sobre todo para generar electricidad. Según ha filtrado el Gobierno israelí, Irán alcanzará independencia tecnológica atómica en tres meses, lo que dejaría su programa nuclear fuera del alcance de un boicot internacional.
El plazo de tres meses no es superfluo, ya que en marzo está convocada una sesión de la Agencia Internacional de la Energía Atómica que -para Estados Unidos e Israel- podría ser la última posibilidad de detener a Teherán mediante la diplomacia.
Un Irán atómico llegaría más lejos de donde intentó llegar Irak con Sadam Hussein y alteraría la geoestrategia de Medio Orienete.
Israel no descarta el empleo de otros métodos persuasivos si la diplomacia no detiene el programa nuclear.