En su discurso, el supuesto Saddam Hussein exhorta a los ciudadanos iraquíes a no entregar información sobre los miembros de la resistencia que atacan a las fuerzas de ocupación anglo estadounidenses.
“Les anuncio que se han creado células de resistencia y que ya han comenzado su misión contra los invasores infieles. Les digo que los extraño, aunque estoy entre ustedes y en su filas”.
El ex líder iraquí -cuyo paradero se desconoce desde la caída de Bagdad, el pasado 9 de abril- dice también que sus “colaboradores aún se encuentran en Irak”.
Ibrahim Hilal, editor de Al Jazeera, dijo que la cinta fue grabada telefónicamente. “Alguien llamó, nos pasó la cinta por teléfono y nosotros la grabamos. Duraba 20 minutos. No sabemos quién hizo la llamada, pero no tenemos razones para dudar de su autenticidad” concluyó Hilal.
Recompensa
Mientras esto sucede y Saddam parece jugar al gato y al ratón con los americanos (y su fijación por descubrir las armas químicas iraquíes), Estados Unidos quiere cazarlo ofreciendo una recompensa para quien aporte alguna información que demuestre que Saddam está muerto o aporte datos para facilitar su captura.
Paul Bremer, el administrador americano para Irak, aseguró que recompensarán con 25.000.000 de dólares a quienes aporten datos específicos por Saddam o 15.000.000 de la misma moneda por el paradero de sus hijos Uday y Ousay.