Una nueva emisora satelital jordana emitió 22 episodios de «al-Shatat» (La diáspora) hasta que el gobierno la prohibió el pasado viernes 28 de octubre.
«Nos alegramos por el cese de un programa de TV tan antisemita y antiisraelí», afirmó Jacob Raber, agregado de prensa israelí en Jordania.
Las autoridades jordanas no hicieron declaraciones a pesar de que, afirman la agencias internacionales, una buena parte de la opinión pública jordana está furiosa con las políticas de Israel y considera que el gobierno prooccidental del rey Abdalá es demasiado conciliador con los israelíes.
La miniserie de 29 episodios fue producida en Siria. En ella, personajes judíos hablan de crear un gobierno judío global. Una prostituta enferma en un burdel donde la madama es judía dice que desea infectar a clientes no judíos.
La serie se basa en los «Protocolos de los Sabios de Sión», que describe un supuesto plan judío para adueñarse del mundo. Se trata en realidad de un antiguo fraude perpetrado por la policía secreta del zar ruso Nicolás II para culpar a los judíos por los problemas de su país, y que fuera adoptado por la propaganda antisemita de todas las épocas.