Coimas al gobierno de Saddam Hussein:

Ropa limpia negocios sucios

Unas 2.200 empresas que participaron en el programa de las Naciones Unidas ‘Petróleo por alimentos’ - entre ellas corporaciones de Francia, Alemania y Rusia- pagaron 1.800 millones de dólares en sobornos y recargos ilícitos al entonces gobierno de Saddam Hussein en Irak, según una investigación respaldada por las Naciones Unidas.

El informe del comité que investiga el programa de 64.000 millones de dólares, dijo que varios políticos destacados obtuvieron beneficios en la manipulación del programa, diseñado por la ONU para socorrer a la población iraquí.
Los investigadores dijeron que empresas e individuos de 66 países pagaron sobornos ilegales mediante diversas estratagias, y los que pagaron recargos ilegales por crudo procedían o estaban registrados en 40 países.
La automotriz alemana DaimlerChrysler pagó, al parecer, solamente 7.000 dólares por un contrato valorado en 70.000. DaimlerChrysler AG, según la agencia de noticias AP, no devolvió las llamadas telefónicas hechas a sus oficinas en la ciudad alemana de Stuttgart en busca de comentarios.
El informe dijo, por ejemplo, que la firma de Bruselas Volvo Construction Equipment pagó 317.000 dólares en cargos extras al gobierno de Irak por un contrato de 6,4 millones de dólares. Volvo Construction es parte del conglomerado sueco Volvo Group. El grupo es una entidad separada de la automotriz de turismos Volvo, propiedad de la estadounidense Ford.
El informe sostuvo que Jean Bernard Merrimee, el ex embajador de Francia en la ONU, habría recibido 165.725 dólares en comisiones de las partidas de crudo que le fueron concedidas por el régimen iraquí. Este dato está siendo investigado por las autoridades francesas.
Merrimee «comenzó a recibir del gobierno de Irak partidas de petróleo que totalizaron a la postre seis millones de barriles», dijo el informe.
Otros que se habrían beneficiado fueron el legislador británico George Galloway; Roberto Formigoni, presidente de la Lombardía italiana, y el reverendo Jean Marie Benjamin, un sacerdote que trabajó otrora en la secretaría de estado del Vaticano y defendió la derogación de las sanciones iraquíes.
El informe estuvo encabezado por el ex presidente de la Junta Federal de la Reserva estadounidense Paul Volcker.
Esta información puede ampliarse en http://www.iic-offp.org/