Argentina:

El día después

El triunfo de Cristina Kirchner envalentonó al oficialismo que ya proyecta un gran futuro para la primera dama. Fuentes cercanas al Gobierno aseguraron, según informa el diario Río Negro, que a Kirchner le entusiasma la idea de proyectarla como presidenciable. Por ahora, tendría como rival al gobernador neuquino Jorge Sobisch, aliado a Mauricio Macri. Y si bien faltan dos años, una eternidad en política, Kirchner ya dijo a sus ministros que no piensa buscar la presidencia 2007. ¿Será ese el año de la reelección o de Cristina?

El triunfo de Cristina Kirchner en la provincia de Buenos Aires emocionó al oficialismo, al punto de que los principales funcionarios del entorno de la primera dama ya dejan trascender que sueñan con postularla como candidata al Ejecutivo en el 2007.
Aunque falta mucho para esas elecciones, los asesores del presidente dicen -en privado- que a Kirchner lo entusiasma la idea de postular a su esposa como su sucesora en la Casa Rosada.
Al menos, según informa la agencia ABA, y publica el diario Río Negro, eso es lo que admitían en el entorno más íntimo de Kirchner el domingo 23.
El domingo 23, el diario Río Negro le preguntó a Enrique Albistur, secretario de Medios, si el triunfo de Cristina terminaba en una candidatura presidencial en el 2007. Albistur sólo se limitó a sonreír, y guiñó un ojo.
El análisis que hacen en la Casa Rosada es que este triunfo electoral en la provincia de Buenos Aires no sólo sirve para instalar la imagen de que el duhaldismo «murió», sino que también, sobre todo, transformó a Cristina en «presidenciable».
El oficialismo prepara, también, un afianzamiento de su proyecto en la provincia de Buenos Aires para derrotar definitivamente la duhaldismo. El dato que más entusiasma a los ‘pingüinos’ es que el duhaldismo perdió la mayoría en la legislatura bonaerense, su «caja» histórica y desde dónde intentaban ponerle límites al gobernador Felipe Solá.
En la Casa Rosada dicen que, así como Kirchner sueña con postular a Cristina en el 2007, también el armado político de su candidato a gobernador en Buenos Aires, Aníbal Fernández, actual ministro del Interior.
En el gobierno decían ayer que Fernández podría dejar su puesto y ocupar otro ministerio menos conflictivo. Así se resguardaría su imagen para lanzarse a la gobernación.
Aunque falta mucho, el gobierno ya mira al 2007, y se evalúan las dos hipótesis. ¿Será la reelección o la candidatura de Cristina? De todos modos, ahora que tienen las manos libres -políticamente hablando- también sería provechoso que comiencen a mostrar otro tipo de gestión de gobierno. Esta es la verdadera oportunidad para ejercerla.