De este modo, al igual que en Estados Unidos, Canadá, Inglaterra, Holanda, Bélgica y otros países, la Argentina cuenta, a partir de la fecha, con una nueva corriente de opinión que reflejará el sentir de muchos de sus ciudadanos, de un modo plural, en su apoyo a las acciones de Shalom Ajshav de Israel.
Es bien sabido que no existe una solución permanente de carácter militar.
La muerte de soldados y civiles, israelíes y palestinos, acecha como una amenaza cada día que se demora en encarar negociaciones directas.
Los atentados terroristas de las milicias palestinas y las represalias del ejército israelí alejan, cada vez más, esta nueva oportunidad que se abre con el compromiso y el involucramiento de la comunidad internacional en la solución del conflicto palestino- israelí, a través del llamado “Cuarteto de Madrid” , señalando a ambas partes una hoja de ruta posible hacia la obtención de la ansiada paz.
Ahora bien, cuando apoyamos a Shalom Ajshav (Paz Ahora) ¿qué estamos apoyando?
1) A un movimiento pacifista extra-parlamentario que, durante más de 20 años, ha bregado por establecer negociaciones directas con los palestinos y que, en sus concentraciones masivas, ha logrado atraer a cientos de miles de personas.
2) A un movimiento que durante años ha luchado contra la injusticia de la ocupación y la creación de obstáculos en el logro de la paz, incluyendo especialmente los obstáculos al principio “ paz por territorios”. La construcción de asentamientos en los territorios ocupados constituye uno de los mayores obstáculos para la paz, concebidos por sucesivos gobiernos para impedir el retorno de los territorios y la creación de un estado palestino viable. El otro gran obstáculo es el terrorismo asesino.
3) Que en los fundamentos de un acuerdo de paz final, algunos asentamientos podrán ser absorbidos por Israel y otros tendrán que disolverse. El resto deberá subordinarse a la soberanía y leyes de los palestinos.
4) Que Jerusalem será la capital de dos naciones: la israelí y la palestina. Sus límites deberán redefinirse, reconociendo el hecho de que allí coexisten dos pueblos con derechos nacionales y políticos. La ciudad será una, no se dividirá. En las zonas judías será la capital de Israel y en las árabes será la de Palestina. Los límites municipales podrán ser reajustados a tal fin y los sitios sagrados de las tres religiones tendrán libre acceso, asegurando de este modo los derechos religiosos y la libertad de culto.
Por ultimo, apoyando a Shalom Ajshav, a través de Argentinos Amigos de PAZ AHORA participamos de una organización que apoya un judaísmo de compromiso con la Justicia y con la Paz.
Envíe su adhesión a: info@pazahora.net
Web site (en construcción): www.pazahora.net
