Los colonos expresan, así, su frustración porque el Primer Ministro israelí, Ariel Sharón, no escucha sus demandas de celebrar un referéndum nacional antes de llevar a cabo la medida.
Miles de israelíes derechistas y religiosos que se oponen a la retirada de Gaza marcharon en Tel Aviv, en la que podría ser el último intento por bloquear la evacuación de los colonos que viven en los territorios ocupados.
La masiva protesta convocó a manifestantes que juraron impedir la retirada, cuyo inicio está planeado para el próximo miércoles 17, aunque marchas anteriores han fracasado en su intento por frenar el plan de Sharón, que ya supo atravesar duras barreras políticas y legales.
Vestidos de naranja, centenares de manifestantes habían salido horas antes de las 21 colonias que deben ser evacuadas. Ninguna autoridad política acudió al acto.
Por su parte, la principal organización de colonos de Gaza y Cisjordania, ‘Yesha’, siguió dando instrucciones sobre cómo infiltrarse en los territorios que serán evacuadas con el fin de apoyar a sus residentes.
Para impedirlo, el ejército israelí limitó el acceso a Gaza exclusivamente a sus habitantes, las fuerzas de seguridad y aquellos que entreguen mercancías de primera necesidad o que ayuden a las familias de colonos a mudarse de sus casas.
La Plaza Rabin, lugar así denominado a partir del asesinato en ese lugar del entonces Primer Ministro Rabin, estaba engalanada con las tradicionales pancartas empleadas por los colonos con el lema «Un judío no expulsa a otro judío», que se entremezclaban con el color naranja de las remeras que llevaban muchos de los manifestantes y que simboliza al movimiento de resistencia colono.