Dictamen del Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (INADI)

“El obispo Baseotto cometió un acto de discriminación”

El INADI -Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo-, a través de su Dictamen nº169/05, determinó que el obispo Antonio Baseotto cometió un acto de discriminación en ocasión de la homilía que pronunciara en la Basílica de Luján, durante la misa de cierre de la peregrinación de miembros de las Fuerzas Armadas y organismos de seguridad interior, en el año 2004.

Durante la citada homilía, el obispo Baseotto expresó: “La exigencia de identidad brota de la situación histórica por la que pasa nuestra patria en un mundo globalizado y confuso. Y brota de nuestra fe. En Europa desdibujada en su identidad, que ha renunciado a sus raíces cristianas, el fenómeno musulmán produce un tembladeral y la lleva a una agonía inexorable, a un colapso como pueblo. Es hora de escarmentar en cabeza ajena y apostar por ser nosotros mismos. El coqueteo con una izquierda sin sustento ni prestigio después del muro de Berlín y del desguace de la URSS, las ambigüedades mezcladas de complejo de inferioridad de un pluralismo anónimo e indefinido, el propiciar un diálogo que concluye inexorablemente en renuncias claudicantes…”.
La denuncia fue presentada ante el INADI por el señor Miguel Monserrat, Vicepresidente de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos -APDH-, el 7 de diciembre de 2004. Este Instituto, de acuerdo al mandato de su Ley Fundacional (nº 24.515), evaluó la denuncia y, aplicando el procedimiento correspondiente, dictaminó que la conducta del obispo Baseotto en la circunstancia mencionada se enmarca como acto discriminatorio, de acuerdo a lo previsto en el Art. 1 de la Ley de Actos Discriminatorios (nº 23.592) y a las Convenciones pertinentes anexadas a nuestra Constitución Nacional.
En su alocución, Baseotto descalificó el diálogo y el pluralismo, dos pilares fundamentales del régimen constitucional democrático vigente en la República Argentina. Cabe destacar que al realizar su descargo, el obispo Baseotto no se desdijo de las expresiones vertidas en la homilía.