Pese a las advertencias, los combatientes palestinos dispararon ayer, 1 de febrero, tres proyectiles de mortero contra un asentamiento judío en la Franja de Gaza, tras otro ataque parecido acaecido el lunes 31 de enero. Los proyectiles no causaron víctimas ni daños materiales.
El fiscal general israelí dictaminó que la decisión secreta del gabinete de confiscar tierras en Jerusalem, de los palestinos afincados en Cisjordania, viola el derecho israelí y el internacional. El ministro de Defensa israelí Shaul Mofaz se entrevistó el lunes 31 de enero con el negociador palestino -Mohamed Dahlan- para analizar la transferencia de las aldeas cisjordanas a las fuerzas de seguridad palestinas.
Mofaz declaró a Dahlan que Israel se retirará de una sola aldea y sólo en forma gradual en lugar de las cinco en forma simultánea, al parecer empezando con Ramallah, sede del gobierno palestino, dijeron varios funcionarios que solicitaron la reserva de sus nombres.
El repliegue podría comenzar durante los próximos días, pero no necesariamente antes de que el primer ministro Ariel Sharon y el líder palestino Mahmoud Abbas realicen su primer encuentro, el 8 de febrero, en un balneario egipcio.
»No les diremos que desistan si se retiran de Ramallah, pero queremos que adopten los compromisos anteriores, la retirada de cinco ciudades», dijo un funcionario palestino.
El encuentro entre Mofaz y Dahlan quedó empañado por la muerte, el pasado lunes, de una palestina de 10 años en un campamento de refugiados de Gaza, a la que siguió una andanada de morteros disparada contra los asentamientos judíos.
Niña palestina
La muerte de una niña palestina de 10 años que recibió un balazo en la cabeza mientras estaba en el patio de su escuela motivó que militantes islámicos lanzasen obuses contra asentamientos judíos y amenazaba una frágil tregua no oficial entre israelíes y palestinos.
Aunque las circunstancias de la muerte de Norhan Deeb no estaban claras, la violencia enrareció la atmósfera de buena voluntad entre el Primer Ministro Ariel Sharón y el nuevo líder palestino, Mahmoud Abbas.
Pese a las tensiones, altos funcionarios de seguridad de ambas partes se reunieron por la noche del lunes para ultimar los detalles del pase a control palestino de varios poblados de Cisjordania.
Deeb murió en el patio de una escuela de la ONU en el campamento de refugiados de Rafah. El campamento, cerca de la frontera con Egipto, es escenario frecuente de choques entre tropas israelíes y militantes palestinos.
Testigos palestinos dijeron que los disparos provinieron de una posición militar israelí junto a la frontera mientras que las fuerzas israelíes manifestaron que ninguno de sus hombres había abierto fuego en el área donde la niña resultó muerta. »De acuerdo a nuestro examen, al parecer la niña no fue baleada por el ejército israelí», indicó la oficina del portavoz militar.
Horas más tarde, militantes islámicos dispararon al menos seis obuses contra asentamientos judíos en Gaza, y dañaron una vivienda. El grupo Hamas se atribuyó la responsabilidad del hecho.