Sin embargo, en varias localidades, como Belén y Naplusa, Hamas obtuvo más votos que Al Fatah.
Un responsable de la comisión electoral local, Firas Yaghi, afirmó que los votos ya habían sido contados en 21 de las 26 localidades donde hubo elecciones.
‘Al Fatah llega en primer lugar, seguido por Hamas, los independientes y el Frente Popular de Liberación de Palestina [FPLP]’, dijo Yaghi, agregando que “en algunas localidades, Hamas obtuvo más votos que cualquiera de las otras formaciones”.
Yaghi no dio cifras, pero según un cómputo realizado por una agencia de noticias internacional a partir de los resultados preliminares en 22 localidades, Al Fatah controla 13 consejos municipales, mientras que Hamas controla 9.
En esas localidades, los candidatos de Al Fatah obtuvieron 135 escaños y los de Hamas 75.
Según Yaghi, participaron en la elección 84% de los 140 mil palestinos con derecho a votar.
La sucesión de Arafat
Uno de los principales objetivos de la elección era conocer el seguimiento obtenido por Hamas faltando sólo dos semanas para la elección presidencial del próximo 9 de enero, fecha en la que se decidirá quién sucederá a Yasser Arafat al frente de la Autoridad Palestina.
Cabe recordar que Hamas llamó a boicotear esa elección.
Unos 886 candidatos, de ellos 139 mujeres, se presentaron para los 306 escaños de los consejos municipales en las 26 localidades.
En Belén, el movimiento Hamas obtuvo 13 escaños y Al Fatah 5. En Naplusa Hamas obtuvo 11 escaños y Al Fatah, creado por Arafat, sólo 6.
Sin embargo en Jerusalem, Jericó, Kalkiliya, Tulkarem, Tubas y Salfit, Al Fatah obtuvo más consejeros que Hamas.
La Comisión Palestina Independiente para los Derechos Ciudadanos (PICCR) afirmó que en su conjunto las elecciones fueron “equitativas”.
Esta elección municipal, la primera en 28 años, se llevó a cabo en sólo 26 localidades de Cisjordania. En los próximos meses habrá elecciones similares en el resto de los territorios palestinos.
Para Abú Mazen, candidato de Al Fatah a las elecciones presidenciales, esta consulta supone el primer paso de un plan nacional para «legitimar al Ejecutivo de la Autoridad Nacional Palestina».
