Ya pasaron 28 años desde la desaparición con vida de aproximadamente 1.900 jóvenes judeo-argentinos. Fueron víctimas del Terrorismo de Estado y parte de los 30.000 desaparecidos y asesinados en los campos de concentración, en los cuarteles y en las comisarías de la dictadura.
Desde entonces, el reclamo y la exigencia de ‘juicio y castigo a todos los culpables’ y ‘cárcel a los asesinos’ nos convoca y organiza para superar los obstáculos que -después de haber prometido ‘justicia’- pusieron cada uno de los sucesivos gobiernos democráticos.
La dirección de la AMIA encontró en el tema de los desaparecidos del ‘pasado’ la oportunidad para saldar sus propias cuentas de complicidad y silencio de tantos años, reiterando -una vez más- su solidaridad con el Estado nacional y el actual gobierno.
Lo hacen ocultando su rol de sostenimiento de la impunidad durante los últimos 10 años y el papel que jugó el gobierno Kirchner al promover la libertad de todos los inculpados por la masacre impune de la AMIA (Ver diario La Nación, 1/09/04) horas antes de conocerse el fallo miserable que exculpó de cualquier responsabilidad criminal no sólo a los Telleldín y Ribelli, sino al Estado mismo.
Lo hacen sabiendo que a pesar de las promesas y decretos presidenciales, los ‘archivos secretos’ donde se esconden las responsabilidades criminales del Estado siguen cerrados. Mientras las autoridades de la AMIA afirman públicamente que se oponen a su apertura, el Presidente Kirchner se niega a recibir a los familiares y amigos de las víctimas agrupados en APEMIA, que de manera reiterada le solicitamos una entrevista y que pretendemos entregarle un petitorio con miles de firmas que exigen la apertura de los archivos secretos y su entrega a una Comisión Independiente del Estado para impulsar el juicio y castigo a todos los responsables.
El acto recordatorio de las víctimas del ‘pasado’ es la oportunidad que encuentran para recibir al presidente Kirchner y manifestarse solidarios para con esta política, mientras los Estados aliados refuerzan su compromiso con el argentino para NO investigar su responsabilidad criminal en el atentado a la AMIA o en los crímenes más recientes de Río Tercero y en la masacre del Puente Pueyrredón.
Se trata, entonces, de un acto de reconocimiento que se hacen a si mismos.
Los familiares y amigos de las víctimas de la masacre impune de la AMIA agrupados en APEMIA, reiteramos nuestro reclamo:
· Que abran los archivos secretos.
· Por una comisión independiente para impulsar la investigación de este atentado terrorista de Estado.
· Juicio y castigo a todos los culpables.
