Sharón manifestó en un discurso que aunque él quiere ver a esos grupos violentos y terroristas desmantelados, cualquier acción en ese sentido sería «complicada». Agregó que ahora considera los esfuerzos palestinos para detener las acciones contra Israel como una señal de buena voluntad adecuada.
Los palestinos se han negado a enfrentar a los militantes bajo el temor de que ello desate una guerra civil.
Comentaristas israelíes calificaron el cambio de posición de Sharón como radical y significativo.
«Ya no existe la exigencia… de una guerra total de la Autoridad Palestina contra los grupos terroristas, el decomiso de armas y la reforma gubernamental», se afirmó en un editorial, publicado este viernes 19 de noviembre, del diario israelí Yediot Ahronot.
Al ser consultado sobre los comentarios de Sharón, Abú Mazen, indicó que el tema sobre cómo tratar con los grupos y facciones palestinas sería tratado en futuros contactos con Israel. «Tenemos cosas por hacer, pero ellos tienen más», concluyó Mazen.
El tono conciliador del Primer Ministro israelí se presenta en medio de los esfuerzos internacionales por reactivar el proceso de paz, con la esperanza generada por la muerte de Yasser Arafat.
El secretario de Estado norteamericano, Colin Powell, así como los jefes de la diplomacia de Gran Bretaña, Rusia y otras naciones occidentales, son esperados en la región la próxima semana.
El secretario de Relaciones Exteriores británico, Jack Straw, debe arribar a Israel el próximo miércoles, mientras que su colega español Miguel Moratinos lo hará el 2 de diciembre.